Es la segunda vez, en su mandato y del ministro Federico Masso, que se encuentra mercadería del Estado en una casa familiar para la posible venta. La primera vez que sucedió quedó en el “olvido” y volvió a ocurrir. ¿Hay un incumplimiento de los deberes de funcionario público?
El gobernador destacó que la Policía está investigando a fondo el caso y que, si se comprueba la comercialización ilegal, los responsables serán encarcelados -lo mismo fue expresado la última vez que se descubrió un hecho similar-.
En referencia a la presunta venta ilegal de mercadería destinada a los programas sociales del Ministerio de Desarrollo Social, Jaldo comentó que la Policía de Tucumán, siguiendo sus instrucciones, está investigando a fondo el origen y el destino de la mercadería encontrada en un allanamiento reciente. “Es fundamental saber si estaba en el lugar donde debía estar y si se destinaba a quienes realmente lo necesitaban”, afirmó, en la cual destacó que cualquier irregularidad será investigada hasta las últimas consecuencias -una frase que suelen usar los políticos-.
El gobernador también habló de no mezclar los casos, ya que este es un hecho puntual y debe ser tratado de manera independiente. “Cada vez que intentamos mezclar situaciones, no llegamos a un buen final. Este es un caso claro, que estamos tratando con la seriedad que merece”, afirmó. Señor Jaldo, que mercadería del Estado sea encontrada en una casa familiar con la posibilidad que sea vendida, no es ni un caso puntual -es la segunda vez que se “descubre” y habrá que ver cuántos casos no salen a la luz- y de comprobar la venta es un hecho gravísimo. La responsabilidad final, por acción u omisión, es la cabeza de Desarrollo Social.