Pero la decisión debe aprobarse ahora en el recinto. Que no quede en palabras y, de verdad, dejen sin efecto el escandaloso aumento
Tras el escándalo que estalló por la noticia de que los senadores tendrían un nuevo aumento y que sus sueldos llegarían a los $ 8 millones por mes en bruto, en la noche de este miércoles los legisladores decidieron dar marcha atrás.
En una nota enviada a la presidente de la Cámara de Senadores, Victoria Villaruel, los jefes de todos los bloques legislativos -oficialistas, dialoguistas y opositores duros- le pidieron que no se les modifique la dieta que reciben en la actualidad.
Pero, desde la Presidencia del Senado aclararon que Villarruel no puede legalmente no otorgar la suba salarial ya que ésta surge del enganche que existe entre los aumentos del personal legislativo y los senadores.
“Nos parece fantástico el acuerdo entre todos los bloques. Lo que deberían hacer ahora es votar en la próxima sesión una resolución en la que desenganchen las subas de las dietas de las del personal del Congreso“, explicaron cerca de Villarruel.
La mecánica debería ser que los senadores presenten un proyecto manifestando que no quieren la suba. Y debería aprobarse. Como el texto fue firmado por los jefes de todos los bloques, se entiende que existe consenso.