El día que Al Qaeda lanzó un ataque simultáneo al corazón de Estados Unidos, con dos aviones que derrumbaron las torres gemelas de Nueva York, otro que impactó en el Pentágono en Washington y un cuarto que cayó en Pensilvania
El 11 de septiembre de 2001, cerca de las 8 de la mañana, 19 yihadistas de Al Qaeda secuestraron cuatro aviones de pasajeros para realizar unos atentados que cambiaron el rumbo de la historia.
Los terroristas, originarios en su mayoría de Arabia Saudita, apuntaron contra los símbolos económicos, militares y políticos del país más poderoso del mundo.
Dos aviones fueron estrellados contra el World Trade Center, en Nueva York y un tercero contra el Pentágono, cerca de Washington DC.
Un cuarto avión apuntaba posiblemente contra el Capitolio, sede del Congreso, o la Casa Blanca, pero tras la heroica intervención de sus pasajeros se estrelló en una zona rural de Shanksville, en Pensilvania.
Ese día, en menos de dos horas, las Torres Gemelas fueron reducidas a una montaña de polvo y acero incandescente, una porción del Pentágono también quedó severamente dañada.
Fue la jornada más oscura de Estados Unidos.
2977 personas murieron y 25 mil resultaron heridas. Miles siguieron sufriendo las consecuencias incluso años después de los ataques.