El Gobierno provincial intensificó el traslado preventivo y voluntario de personas que viven en áreas de alto riesgo
La provincia de Salta se encuentra bajo alerta máxima debido a la inminente crecida del Río Pilcomayo, que alcanzó niveles críticos. En las últimas horas, se confirmó el derrumbe de al menos dos viviendas en Santa Victoria Este y sus alrededores, y una tercera casa se encuentra en peligro de colapso, mientras el agua continúa subiendo.
Según informes, el nivel del río alcanzó los 6,38 metros el miércoles pasado, y aunque se registró una pequeña baja para el viernes, las condiciones continúan siendo preocupantes y se esperan nuevas crecidas para lo que queda de este domingo.
“A través de un megaoperativo intersectorial, se está brindando asistencia continua a las comunidades con maquinaria especializada, vehículos de traslado, atención sanitaria y distribución de alimentos, agua, colchones y frazadas”, expresaron en un comunicado.
Además, se restableció el agua potable en las localidades de La Puntana y Hito 1. Para coordinar todas estas acciones, se instaló un campamento base central en El Rosado, a 35 kilómetros de Santa Victoria Este, que sirve como punto estratégico para las operaciones.
Este campamento, coordinado por el ministro Mario Mimessi y el Comité de Emergencia Climática, cuenta con una base operativa interinstitucional que incluye personal del Ejército Argentino y de Gendarmería Nacional, junto con maquinaria especializada para trabajar en el terreno.
Desde allí, se gestionan las tareas de reubicación de personas mediante transporte terrestre y fluvial, así como el abastecimiento de recursos esenciales.