Bolivia vota este domingo la segunda vuelta presidencial: un candidato de centro y uno de derecha pugnan por gobernar el país

Después de 20 años de populismo, la izquierda quedó afuera de la disputa de poder y muy reducida en la Asamblea Legislativa

El primer balotaje de la historia de Bolivia llega en medio de una profunda crisis económica, marcada por la escasez de combustible en los surtidores, un dólar paralelo al doble del oficial y la falta de divisas.

Se enfrentan un centrista moderado como Rodrigo Paz, 58 años, hijo del ex Presidente Jaime Paz; y el ultraliberal Jorge “Tuto” Quiroga, de 65, que propone un cambio de 180 grados en el país.

Pero a la vez, la elección marca la debacle del MAS, el partido de izquierda que llevó al poder a Evo Morales y a Luis Arce. Después de 20 años, con victorias con más del 50% de los votos, este sector quedó muy lejos en la contienda electoral y dejó huérfanos a sus electores.

Evo Morales, imposibilitado de participar, pidió el voto nulo que llegó al 19% en todo el país. Las otras expresiones de izquierda no sedujeron al votante y este sector político se redujo de manera significativa en la Asamblea Legislativa.

Cada cinco años, los bolivianos eligen Presidente y renuevan todo el Congreso, que ahora tendrá solo ocho representantes de izquierda en 130, y encima divididos.

Los últimos cinco años, las peleas entre el Presidente Arce y su mentor Morales desangraron la economía y en las calles se percibe un sentimiento anti MAS. Esta semana el Instituto Nacional de Estadística (INE), reveló que el PBI cayó al -2,40% en el primer semestre, con una contracción grande en hidrocarburos y minería, que trepó al -12,98 %. Por primera vez en 39 años el país entró en recesión.

El modelo del líder cocalero redujo la pobreza del 60% al 34%, chocó contra sus propios límites. Se agotaron los dólares por las reservas de gas y la inflación del 25% anual crispó el ánimo de la mayoría de los votantes, que solían apoyar al MAS.

Para la primera vuelta de agosto las encuestas fallaron fuerte. Rodrigo Paz figuraba cuarto con el 8% y resultó el primero con el 32,06 %. Al revisar los centros de votación, el candidato del Partido Demócrata Cristiano (PDC), recibió votos de barriadas y zonas rurales que solían apoyar al MAS.

El interrogante es si Paz podrá sostener esos votos, sumar lo que otros partidos de izquierda. También si recibirá el millón de sufragios de los bolivianos que anularon su voto por pedido de Morales. Podría ser un voto especulativo para que no gane el conservador “Tuto” Quiroga, que en agosto sacó el 26,70%.

La campaña tuvo a la economía como único eje y los postulantes presentan dos modelos distintos.

El centrista suele repetir que primero hay que poner la casa en orden, rechaza de plano ir al FMI y remarca que con buena administración puede poner restablecer la economía.

Quiroga propone un shock, pedido de ayuda al Fondo Monetario Internacional, otros organismos de crédito y la búsqueda de acuerdos de libre comercio con otros países.

Cualquiera de los dos que gane, deberá enfrentar un sombrío panorama en la economía, con urgencias como el combustible y un actor ineludible: Evo Morales.

COMPARTIR NOTICIAS

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *