La bioestimulación con plasma rico en plaquetas es cada vez más común entre los famosos y público en general que eligen tener la piel joven
Las rutinas de belleza a lo largo de la historia han ido mutando de diferentes maneras. Desde mascarillas con elementos naturales y poco invasivas, a tratamientos que involucran la colocación de productos inyectables. Mantener la piel firme en el rostro es uno de los objetivos más buscados.
En el último tiempo, creció la demanda de uno de los tratamientos de belleza más novedosos: la bioestimulación con plasma rico en plaquetas.
De qué se trata el Plasma Rico en Plaqueta
La bioestimulación con plasma rico en plaquetas es una técnica ambulatoria para la prevención y manejo del envejecimiento cutáneo. Sirve, además, como tratamiento para la alopecia (pérdida de cabello).
El plasma rico en plaquetas se obtiene con la extracción de la propia sangre del paciente que posteriormente se coloca en una máquina para centrifugar. Esto separa la sangre en varias partes y una de ellas (plasma) será la que posteriormente se utilizará para infiltrar con agujas muy finas en zonas de la piel o el cuero cabelludo que se quiera tratar.
Esto activa las plaquetas y libera los factores de crecimiento. El dolor es mínimo, pero dependerá de cada persona, y las sustancias ayudan a que se generen nuevos vasos sanguíneos en la zona en la que se infiltra llegando más nutrientes a la misma. La colocación es un poco molesta porque son inyecciones intradérmicas, es decir, van dentro de la piel, pero que se utilizan agujas finas para que el procedimiento sea lo más llevadero posible.
“Hemos visto que funciona para los casos de alopecia porque su función es estimular el crecimiento. Es un método seguro porque es la propia sangre del paciente. Va reactivando, bioestimulando. Hay gente que lo percibe enseguida y gente que no lo percibe tan rápido. Nosotros tenemos muy buenos resultados en forma clínica con el tema de la alopecia”, destacó Sonia Sladewski (M.N 87000), médica especialista en Dermatología y miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología.
Acerca de su aplicación en el rostro, explicó que es beneficioso para retrasar las marcas de envejecimiento y que se ven importantes resultados en los pacientes. Con respecto a las características más importantes, destacó: “Es seguro y es económico”, dijo Sonia.
También remarcó que es uno de los tratamientos menos invasivos porque “el plasma es líquido y se absorbe” a diferencia de, por ejemplo, el ácido hialurónico que es “denso y complejo”.
“El paciente ve un líquido amarillo (plasma) que se le coloca en el lugar que quiera estimular. Son 10 centímetros cúbicos que se retiran para el procedimiento”, especificó. “Tenés que darle a la piel de dos a tres meses para que produzca el colágeno. Hay pacientes que responden más tardíamente y otros más rápidamente”, agregó.
Tiene una duración aproximada de seis meses. “Con los años vas perdiendo masa muscular y esto ayuda a para combatir el envejecimiento. Podes acompañarlo con luz pulsada, láser, rellenos, toxinas y demás porque no es contraproducente con otros tratamientos”, contó.
Los precios son económicos porque la materia prima es del propio paciente. Varía según el lugar donde se lo hagan. Es importante destacar que solo puede hacerlo un profesional médico y en un lugar adecuado, ya que hay manipulación de sangre.
La práctica que comenzó a expandirse entre las famosas hoy incorpora cada vez más adeptos que eligen esta opción a la hora de realizarse un procedimiento estético para regenerar la piel y darle mayor luminosidad.