La empresa argentina llegó con su producto estrella, Franuí, a la cadena de cafeterías en el marco de un proceso de expansión internacional
En los más de 300 locales que Starbucks tiene en Francia, desde hace un par de semanas ya pueden conseguirse los Franuí, los mismos chocolates que Rapanui vende en sus tiendas argentinas. La empresa espera hacer llegar el producto a 50 países, de todo el mundo, hacia fin de año. Desde su fábrica en Valencia, España, donde trabajan 180 personas, Rapanui hace llegar su producto estrella a varios mercados europeos, Australia y Medio Oriente.
Las frambuesas bañadas en chocolate llegaron a Francia, hace 9 meses, a través de distintas cadenas comerciales. El contacto entre ambas compañías se dio en SIAL, la Feria de Alimentos más importante del mundo. Allí, dos ejecutivas de marketing de Starbucks encontraron el Stand de Rapanui y no hizo falta ninguna otra gestión. “Eran consumidoras de Franuí y nos conocían bien. Nuestro producto ya se había viralizado en Francia. Crecimos muy rápido y ahora se venderá en más de 300 tiendas de Starbucks”, explicó Leticia Fenoglio, CEO y cofundadora de Rapanui y Franuí. Pronto, asegura, en las calles de París aparecerá una campaña promocional de la marca argentina.
“Es nuestro sueño hecho realidad. Un producto que nació en la Patagonia, en una planta rodeada de montañas y lagos, cada vez llega a más lugares en el mundo. Además de nuestro crecimiento en Francia, a partir de mayo vamos a llegar a Holanda, Bélgica y Luxemburgo. Para fin de año, Franuí va a estar en 50 países en todo el mundo”, dijo Fenoglio, quien agregó que “tímidamente” sus chocolates también están ingresando en el mercado de Estados Unidos.
Rapanui se prepara para dar otro salto a nivel local. Con una inversión de USD 10 millones, arrancó una nueva fábrica en Fátima, Pilar con la que espera triplicar su producción local y fabricar 45 millones de potes de Franuí. Y con la que también apunta a la exportación: la ubicación de la nueva planta se enfocó en la logística que permite acceder más fácil a los puertos, con los mercados de América Latina en la mira.
La nueva planta bonaerense, que tendrá pleno funcionamiento en las próximas semanas, se suma al establecimiento original de la compañía, en Bariloche. Con este entramado industrial, sus 17 tiendas en la Argentina y la política de expansión internacional, la empresa de la familia Fenoglio vendió 4.200 toneladas de chocolate durante 2024, una cifra que crecerá durante este año. La compañía no informó cifras de facturación.