Los tres votos de los diputados que responden al gobernador tucumano se hicieron sentir en la falta de quorum para tratar el proyecto de Ficha Limpia
La caída de la sesión para tratar el proyecto de Ficha Limpia que propone el bloque del PRO en el Congreso, puso al gobernador Osvaldo Jaldo como un aliado inesperado de la condenada Cristina Fernández de Kirchner, quien sería una de las más afectadas de aprobarse la iniciativa, al proponer prohibir que una persona condenada por corrupción en segunda instancia se presente a elecciones. En rigor, el oficialismo no logró que se sentaran en sus bancas algunos diputados que responden a los mandatarios provinciales.
Llamó la atención la ausencia de los diputados del Bloque Independencia, integrado por los peronistas Agustín Fernández, Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla, debido a que suelen acompañar las iniciativas de la Casa Rosada. La decisión de no apoyar, esta vez, obedecería a que habría malestar entre los mandatarios provinciales por algunas señales de que el Gobierno no tendría ninguna preocupación en la aprobación del Presupuesto 2025. El Ejecutivo nacional se sentiría más cómodo con una segunda prórroga consecutiva -el último presupuesto aprobado por el Congreso fue en el año 2022-, pues esto le conferiría discrecionalidad en la administración de los recursos federales. Dueño de la lapicera, los gobernadores tendrían una mayor dependencia de Balcarce 50.
Si se concreta el llamado a sesión, en la Cámara de Diputados, para el próximo jueves donde se trataría Ficha Limpia, ¿Qué hará Jaldo?, ¿cederá sus tres leales diputados para que pueda aprobarse la Ley o volverá a rendirse ante CFK?.