Este martes dejó la Cárcel cordobesa de Bower, el “penal del infierno”. Está acusado de organizar una extorsión
Tissera está imputado acusado de organizar una tentativa de extorsión sobre el dueño de la firma Vilahouse, Florencio Ferrara, que lo estafó en forma similar: el jugador había comprado un terreno en Rojas, su ciudad natal, y pagó 10.000 dólares a esa empresa para que le hagan una casa prefabricada, donde iba a vivir su cuñada. Pero jamás se hizo esa construcción y después de muchos intentos de negociaciones que siempre terminaron truncos y mientras jugaba en Bulgaria, Tissera decidió recurrir a los oficios de gente conocida, entre ellos un personaje muy oscuro llamado Luis Suárez, para intentar que le devuelvan el dinero. Suárez según la Justicia fue con otros seis hombres y extorsionó al dueño de la firma con la anuencia del delantero. Y como la presunta víctima hizo la denuncia, se abrió el proceso judicial que tuvo al jugador preso casi un mes.
La Fiscal del caso, Silvana Fernández, decidió mantener preso a Tissera hasta que se produjera la detención del último miembro del grupo que hizo la tentativa de extorsión, un hombre llamado Ángel Martín Heredia. Este lunes Heredia fue capturado, por lo que el expediente dejó de estar en secreto de sumario y se cayeron los riesgos procesales. Esa fue la llave para que avance la liberación del delantero.
La decisión de la Fiscal de liberar a Tissera viene acompañada con una serie de condiciones que el futbolista de Huracán deberá cumplir: una caución por el dinero que vale la casa no construida, prohibición de comunicación con víctima y familiares, y prohibición de salida del país, por lo cual no podrá jugar con el Globo por Copa Sudamericana los partidos de visitante. Fuentes del caso indicaron que esto último podría modificarse más adelante.