Cande, de 5 años, recibió un disparo en la cabeza y no pudieron salvarla
Candelaria Enrique, de 5 años, que había recibido una bala perdida la madrugada de Navidad durante los festejos en un barrio de Rosario, murió ayer.
El director médico del centro asistencial, donde ingresó la niña tras el balazo, explicó que su cuadro era gravísimo y que esa situación no permitió cirugía o un acto médico que permitiera aspirar a otro desenlace. El especialista explicó que la bala impactó en la cabeza de la nena. Ya en su ingreso al nosocomio fue diagnosticada con “muerte encefálica”.
La familia de Cande decidió donar sus órganos.
Según el reporte policial, el padre de Candelaria, aseguró que salió a las 00.10 a la calle con la menor. Allí fue impactada por el disparo. No se habló de ningún enfrentamiento o hecho de sicariato por el momento.