Edgardo Llano (APA), Pablo Biró (APLA), Rubén Fernández (UPSA) y Juan Pablo Brey (Aeronavegantes) en vez de defender a los trabajadores los están llevando “a la calle”
Se puede protestar pero no perjudicar a los pasajeros que son, en definitiva, quienes les pagan los sueldos. Se puede hacer paro, sí, pero no es la primera opción, debería ser la última. Hacer paros sorpresivos, sin previo aviso, habla más de un ensañamiento por causar daño que reclamar por una causa justa.
Su accionar irresponsable provoca que, el Gobierno acelere con la idea de cerrar la empresa aérea. Por otro lado, si es que había ciudadanos que los apoyaban, eso se dio vuelta y cada vez son más que quieren que se vayan, que los echen, y si se cierra Aerolíneas Argentinas no les importa.
Llano, Biró, Fernández y Brey están actuando de una manera salvaje, con ensañamiento hacia un Gobierno con el que no comulgan. Se dejan llevar más por su ideología kirchnerista que como supuestos líderes sindicales que luchan por los derechos de los trabajadores. Con sus acciones violentas están llevando a alrededor de 11.000 trabajadores a la calle. Total, ellos ya son millonarios y algún curro, bajo las alas kirchneristas, van a seguir teniendo.
Es tal el salvajismo con el que actúan que muchos otros gremios aeronáuticos han salido a diferenciarse de estos “golpistas”.
No solo que el Ejecutivo nacional los emplazó -a los gremialistas- a dar soluciones hasta este viernes -si no se cierra la empresa- sino que deicidio deshacerse de INTERCARGO (fue la causante del caos de este miércoles en Aeroparque y Ezeiza) y hoy anunció que echaba a 15 trabajadores de esa empresa.
Edgardo Llano (APA), Pablo Biró (APLA), Juan Pablo Brey (Aeronavegantes) y Rubén Fernández (UPSA), sobre sus conciencias (si es que las tienen) recaerá la responsabilidad de lo que pase con Aerolíneas Argentinas y las miles de familias que dependen de ella.
