Los sindicatos se preparan para confrontar
Una auditoría busca recortar las horas extras y los adicionales que cobran muchos empleados públicos que, en algunos casos, superan el monto del sueldo básico.
La auditoría que mandó a realizar el Gobierno ha detectado caso de estatales que, por ejemplo, tienen ingresos por 450 mil pesos pero que en el conformado salarial la mitad correspondería a horas extras y otros ítems adicionales.
El plan oficial pretende recortar o poner topes al pago de horas extras y otros suplementos con el objetivo de achicar el gasto. Citan como ejemplo el caso de un agente que gana $473 mil de bolsillo, con un sueldo básico de $178.225 y una “compensación” de $162 mil.
Las voces de protesta de los gremios: “El problema es que si les sacan esos adicionales quedarían sueldos de hambre. Está todo tan mal que muchas veces estos empleados no quieren ascender en su carrera porque ganarían menos porque perderían la parte supletoria”, comentó un dirigente de UPCN.
“El problema es que hoy la mitad de los salarios del sector no superan la línea de pobreza”, dijo un referente de ATE.