Para elegir diputados y senadores nacionales se usará una sola boleta en la que figurarán todos los candidatos. La selección se hará con una cruz o tilde
La Boleta Única de Papel (BUP) fue sancionada por el Congreso. El Gobierno de Javier Milei reglamentó la Ley y tendrá su estreno en los comicios de octubre, cuando se elegirán 127 diputados y 24 senadores nacionales.
Se trata de una novedad porque supone el final de un sistema que imperó durante los últimos 40 años de democracia. La boleta partidaria fue instrumento de votación, pero también herramienta de militancia. Sirvió de ley y también, a veces, de trampa. Con esas papeletas largas -bautizadas “sábanas”- se eligió del presidente al último consejero escolar. El palacio y la calle: se terminan los bolsones con fideos, harina y aceite que llevaban pegados la boleta de candidatos sonrientes.
“La Boleta Única de Papel simplifica la votación. Los regímenes electorales todos tienen sus críticas. La primera experiencia dio muchos votos impugnados en algunas categorías, pero en la segunda experiencia ya la gente comprendió cuál era el error. Es un buen sistema. Respecto de si es más caro o más barato, la democracia siempre tiene su costo. Las malas decisiones políticas de la ciudadanía también tienen su costo, incluso suele ser más caro”, afirmó Alfredo Cornejo, gobernador de Mendoza, donde ya se aplica la BUP desde hace tiempo.
La opinión de Cornejo es clave porque es la provincia que tiene el modelo que será adoptado en octubre, con toda la oferta electoral en un mismo papel. Arriba tendrá los colores y nombres de los partidos, debajo los nombres y fotos de los candidatos a senadores (en las ocho provincias que eligen) y debajo los nombres de los cinco primeros candidatos a diputados de la lista, de los cuales, los tres primeros podrán tener sus fotos. En ambas categorías habrá un cuadrado donde el elector podrá hacer una tilde o cruzar con una birome que le proveerá el presidente de mesa, junto con la boleta única. Si no marca, se lo considerará en blanco. A diferencia del modelo de Córdoba, no habrá espacio para elegir “boleta completa.
El impacto en los partidos
Junto al cambio en el acto específico de votar, la reforma electoral que supone la BUP tiene un impacto de proporciones desconocidas. Hay miradas positivas y otras que expresan dudas y críticas sobre lo que implicará la novedad.
La eliminación del efecto arrastre, según los expertos, es horizontal, porque implica un desdoblamiento de hecho de los candidatos nacionales respecto de los candidatos locales. No “tira para arriba” la cabeza de la lista -sea el senador o diputado o el presidente, en su momento- como tampoco “empuja” la categoría del intendente a las instancias superiores. “Esto es lo que se rompe y el resultado de eso es un beneficio mayoritario a favor del oficialismo”, explicaron a este medio otras fuentes consultadas para esta nota.
“La ruptura del arrastre provoca mayor fragmentación y esto, a su vez, puede generar una mayor inestabilidad al sistema político. Hoy tenés el peronismo dividido en cristinistas, anticristinistas, massistas, colaboracionistas; hay radicales con peluca, sin peluca, y otros que son directamente opositores; y hay macristas que a la hora de decidir prefieren a Javier Milei. A todo esto, se le va a agregar la fragmentación del BUP”, consideró una de la misma voz.
Entre las especulaciones que se abren ante este escenario es el de la irrupción de “cooperativas” en distintos distritos: cuatro o cinco intendentes pueden juntarse, armar una lista en el centro de la provincia de Buenos Aires y conseguir bancas de diputados nacionales y provinciales y senadores provinciales. Pero también que Milei decida seleccionar activistas de X, como “El Gordo Dan”, para postularlos con la foto en la ciudad de Buenos Aires o en la Provincia.
Maru Zamarreño, del CIPPEC, una de las organizaciones de la sociedad civil que más se comprometió con esa reforma, anticipó que en las elecciones de octubre, al ser la primera vez que se va a poner en marcha este cambio, es muy probable que el conteo sea más largo: “Hay autoridades de mesa que venían acostumbradas a otro sistema y que van a tener que adaptarse al nuevo. Puede demorarse el momento de la votación y después el recuento. Por eso planteamos que los partidos deben ser los más ocupados en capacitar a los electores”. “Los fiscales son más necesarios que nunca fundamentalmente para el conteo de los votos y para la supervisión del proceso electoral”, agregó.
Es una nueva modalidad electoral que tendrá que adaptarse, pero necesaria para dar mayor transparencia al proceso de votación.
Con información de Facundo Chaves