Los vecinos son amenazados de secuestro si intentan expresarse contra el Gobierno
El clima de tensión en Venezuela no cesa, pese a que ya pasaron 15 días desde las elecciones presidencial en las que el dictador, Nicolás Maduro, se autoproclamó ganador, a pesar del fuerte rechazo que provocó en la comunidad internacional que denuncia que hubo fraude. En las últimas horas, denunciaron que en el Barrio 23 de Enero, de Caracas, colectivos chavistas marcaron las casas en forma intimidatoria de quienes salieron a protestar en contra del Gobierno.
“Son demasiadas casas. Eso indica que hay un gentío en contra del Gobierno en la propia área de los colectivos (chavistas)”, sostuvieron fuentes consultadas.
Las viviendas quedaron marcadas con una letra X en color negro. De esta forma los vecinos que quieren protestar son individualizados y amenazados de secuestro si lo intentan.
El Barrio 23 de Enero es una zona popular de Caracas, donde se encuentran los restos del fallecido presidente -también dictador-Hugo Chávez. Sin embargo, desde que Maduro se proclamó ganador y la comunidad internacional no reconoció el triunfo, las cacerolas resonaron con fuerza en rechazo a la proclamación.