¿El estado le concederá el deseo de hacer terapia hormonal masculinizante con plata del pueblo a una asesina que debería tener pena de muerte?
Abigail Páez, novia de Magdalena Espósito Valenti, ambas sentenciadas hace unos días a cadena perpetua por el aberrante crimen del pequeño Lucio Dupuy, de apenas 5 años, expresó su intención de comenzar una terapia hormonal masculinizante, porque ese es el género con el que se identifica. Además, quiere sacarse sus mamas.
En caso de que la hormonización prospere, Abigail seguirá en una cárcel de mujeres. “No está previsto que una mujer, aunque complete ese proceso, vaya a una cárcel de hombres”, explicaron.
En cuanto al monto y quién abonará ese tratamiento, desde el Servicio Penitenciario prefieren no dar especificación. Aunque dejaron entrever que una parte la abonará el Estado, es decir, los contribuyentes.
Abigail y Magdalena están juntas en el Complejo Penitenciario N°1, de San Luis. Estas dos mujeres, que son pareja, abusaron y asesinaron al niño de cinco años, hijo de Magdalena. Por ese aberrante hecho fueron juzgadas y sentenciadas a cadena perpetua.
Las delincuentes, cuya aberración hacia el niño fue ampliamente comprobada durante el juicio, se encuentras juntas en la misma cárcel.
Y ahora, en vez de pagar por el daño irreparable que causaron, ¿el estado le concederá su deseo de cambiar de sexo?.
Aquí, todo puede pasar.