Un sondeo de D’Alessio IROL / Berensztein dio esos resultados en la provincia de Buenos Aires donde muchos funcionarios se presentarán como testimonial en las próximas elecciones. ¿Habrá voto castigo?
Todo indicaría, según fuentes cercanas a Casa de Gobierno de Tucumán, que el gobernador Osvaldo Jaldo se presentaría como primer candidato a diputado nacional -Partido Justicialista- para las elección del próximo 26 de octubre. Obviamente será una candidatura testimonial, es decir, que ganando no asumirá ese compromiso. En pocas palabras, una mentira al electorado.
No se sabe qué encuestas le mostraron al mandatario tucumano, y si de eso depende que asuma un compromiso riesgoso: ser testimonial.
Lo que se midió en Buenos Aires y podría servirle de alerta a Jaldo
La estrategia de las candidaturas testimoniales, una herramienta a la que el peronismo recurrió en varias elecciones -incluido Jaldo en Tucumán-, podría generar un fuerte “voto castigo” en los comicios de este año. Así lo revela una encuesta de la consultora D’Alessio IROL / Berensztein, que midió el humor social en la provincia de Buenos Aires frente a esta práctica.
El sondeo encendió las alarmas en el frente “Fuerza Patria”, que lleva como candidatos testimoniales a figuras como la vicegobernadora Verónica Magario; el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi; el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza; la intendente de Quilmes, Maira Mendoza; entre otros funcionarios que no asumirán su cargo en caso de resultar ganadores.
El rechazo de los bonaerenses
Ante la pregunta “¿Está de acuerdo con que un funcionario que hoy ocupa un cargo ejecutivo sea candidato y, si gana, no asuma?”, los resultados del sondeo de D’Alessio IROL / Berensztein fueron contundentes:
- Muy en desacuerdo: 50,2%
- Algo en desacuerdo: 11,4%
- Total en desacuerdo: 61,6%
Solo un 25,1% se mostró a favor de esta estrategia (15,2% muy de acuerdo y 9,9% algo de acuerdo), mientras que un 13,3% no supo o no contestó.
El rechazo a las candidaturas testimoniales es transversal a todos los espacios políticos. Entre los votantes de Unión por la Patria en 2023, el rechazo llega al 42%, mientras que entre los de Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza, la cifra se dispara al 82% y 75%, respectivamente.
La encuesta, realizada sobre 1.157 casos en la provincia de Buenos Aires, pone sobre la mesa el riesgo que asume el peronismo al recurrir a esta táctica en un electorado que, según el estudio, se muestra cada vez más crítico y exigente con la dirigencia política.
