Obvio que los corruptos no quieren una Ley de Ficha Limpia ya que muy pocos podrían ser elegidos. Tampoco estuvieron los que responden a Manes y Lousteau
En los últimos días de sesiones ordinarias, todo hace suponer que el PRO deberá esperar otro año (lo intenta desde el 2017) para poder avanzar con su anhelado proyecto de Ficha Limpia para acceder a cargos públicos.
Pasados los 30 minutos desde el inicio de sesión, el tablero indicaba 128 presentes y el presidente de la Cámara, Martín Menem, no hacía lugar al pedido del PRO de prorrogar 15 minutos y se caía la sesión.
Más allá de la ausencia de los 99 diputados del bloque de Unión por la Patria y de los 5 del bloque de izquierda, que era previsible, además “se borraron” los diputados de la UCR que responden a Manes y Lousteau.
Por el PRO se ausentaron los diputados Alejandro Finocchiario, José Nuñez y Anibal Tortoriello. El caso de Nuñez es por el que se pidió una extensión del plazo, ya que llegó tarde. Por el oficialismo no estuvo Marcela Pagano, quien cursa un embarazo.
Por el bloque de Encuentro Federal, los ausentes fueron Florencio Randazzo, Natalia De la Sota, Jorge Ávila y Alejandra Torres. El diputado Esteban Paulón llegó un minuto tarde.
Lo llamativo también fue la ausencia de los tres diputados de Tucumán –Agustín Fernández, Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla– del bloque Independencia. Los legisladores que suelen acompañar a la Libertad Avanza hoy no estuvieron presentes.
El proyecto, que ha sido reclamado días atrás por el ex presidente Mauricio Macri, propone que la inhabilitación de los políticos comience desde que exista una sentencia condenatoria, aunque no esté firme, siempre que sea confirmada por un órgano judicial superior. Esto incluye delitos como cohecho, tráfico de influencias, malversación de fondos públicos y enriquecimiento ilícito, entre otros. La confirmación judicial sería responsabilidad de la Cámara de Casación.