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Qué parte de los negociados de los gerentes de la pobreza no aprendieron de Nación en Tucumán. El reparto de mercadería puede estar controlado pero a quiénes se da evidentemente no está. No es la primera vez que sucede una irregularidad con el ministro actual

Los funcionarios públicos que sean incapaces de ejercer un cargo, donde tienen que ser custodios de patrimonios del Estado, deben irse a sus casas, y antes pasar por tribunales para dar explicaciones.

Una vez puede pasar. Dos o tres, no. Evidentemente, el ministro de Desarrollo Social de Tucumán, Federico Masso, no tendría la capacidad de conducir y velar por los intereses del Estado.

“La mercadería pertenece al Ministerio de Desarrollo Social y fue entregada a una organización social con personería jurídica, como parte de nuestro trabajo de distribución desde hace un año”, explicó el ministro Masso. Es en referencia al descubrimiento policial -de casualidad- de mercadería del Gobierno destinada a personas carenciadas y que estaba en una casa de Barrio Manantial Sur para la posible venta -ahora se abrió un proceso de investigación-.

Masso aclaró que el material encontrado no está relacionado con el detenido, sino con su padre, quien lidera la organización que retiró los productos el pasado 20 de noviembre. “El detenido no está relacionado con la orden de entrega, y lo que debemos investigar es cómo y por qué esta mercadería fue encontrada fuera de su destino”, señaló.

“No permitiremos que un solo gramo de arroz destinado a los tucumanos más necesitados sea mal utilizado”, subrayó. Tarde señor Masso, lleva un año en el cargo y es la segunda vez que sale a la luz irregularidades en su ministerio.

“Estamos comprometidos con la transparencia y trabajaremos hasta encontrar a los responsables de cualquier abuso”, concluyó el ministro, destacando que los mecanismos de control para la distribución seguirán siendo rigurosos. Evidentemente que los mecanismos de control de riguroso no tienen nada.

Aquí dejamos unos datos para el gobernador Osvaldo Jaldo y su ministro de Desarrollo Social, Federico Masso

Los deberes de un funcionario público son las obligaciones que tiene para desempeñar su cargo, y que están reguladas por leyes no penales. Algunos de los deberes de un funcionario público son: 

  • Cumplir la Constitución, las leyes y los reglamentos 
  • Defender el sistema democrático de gobierno 
  • Actuar con honestidad, probidad, rectitud, buena fe y austeridad 
  • Velar por el interés general y público 
  • Ser responsable de sus actos 
  • Capacitarse y perfeccionarse en su área de trabajo 
  • Utilizar los bienes y recursos asignados para el desempeño de su cargo 
  • Usar la información pública solo para fines oficiales 
  • Abstenerse de cuestiones de interés particular 

Los funcionarios públicos son responsables de las consecuencias de sus acciones u omisiones en el ejercicio de sus funciones. La responsabilidad puede ser política, administrativa, civil, contable, penal o patrimonial. 

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