Ya se reportaron 6.500 casos con 80 internados críticos. La población más expuesta son los adultos jóvenes
Los médicos que trabajan en los hospitales y centros asistenciales están desbordados de consultas. Están viendo casos severos de la enfermedad que transmite el Aedes Aegypti. Los pacientes muestran más dolor de cuerpo y hay muchos cuadros de deshidratación y hemorrágicos.
El tipo de virus que está circulando es el serotipo DEN2, que con mayor frecuencia produce casos severos. Cuando las personas ya tuvieron la enfermedad y se contagian por segunda vez, la reinfección es un factor de riesgo de dengue grave. En este caso, el sistema inmunológico puede generar una respuesta exagerada que perjudique al organismo.
Hay que reconocer precozmente los signos que anuncian la gravedad y evitar la progresión a un cuadro severo. Los síntomas de alarma son: dolor abdominal permanente e intenso; vómitos, tendencia a la baja presión, trastornos sensoriales (irritabilidad) y sangrado de las mucosas (boca, nariz).
Tomás Orduna, médico infectólogo, explica que algo no se hizo bien para llegar a esta situación: “en el invierno y primavera era el momento de trabajar para controlar el mosquito. No hicimos lo necesario. La cantidad de casos que hay hoy es el reflejo de que hay muchísimos mosquitos. Esto va a ser peor si no logramos concientizar a las autoridades y a la comunidad. Se corre el riesgo de tener dengue todos los años”, dijo.
“No sirve la acción individual o poner el foco en la tapita de gaseosa. Si hoy tenemos tantos mosquitos es porque hay muchos recipientes donde se está reproduciendo. El trabajo debe ser colectivo y tener en cuenta cuestiones por ejemplo, la cantidad de residuos plásticos que tiramos y que sirven al mosquito para criarse. El Estado debe llevar adelante una tarea brutal de higiene urbana para destruir criaderos. Y en los barrios, la organización de los vecinos es fundamental para que todos participen en la limpieza de sus casas”, expresó el infectólogo.
Con respecto a una vacuna, está en trámite la aprobación en el país de la vacuna Takeda (la desarrolló una empresa japonesa), que ya fue autorizada por la Unión Europea. “Este avance sería muy importante, aunque esta vacuna es solo una herramienta más en la lucha contra el dengue. Hay que seguir con las tareas de saneamiento ambiental y control del mosquito, ya que también transmite otras enfermedades como el Zika y Chikungunya”, concluyó el médico.
Circulación comunitaria del mosquito: Capital, Yerba Buena, Tafí Viejo, Lules. TAmbién hay casos en La Florida, Delfín Gallo, Cruz Alta, Lastenia, Alderetes, Colombres y Banda del Río Salí.