Ahora, las empresas de ómnibus reducirán los servicios y suspenderán al personal desde este viernes en la Capital y podría extenderse a toda la provincia
Una historia que se repite desde hace años y que tiene al ciudadano como rehén: el eterno problema del transporte público de pasajeros. Según estadísticas, en Tucumán los que más usan los colectivos son: mujeres, niños y adultos mayores, entonces, es ese grupo etario el que más padece el desastre del transporte.
La Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) comunicó que a partir de este viernes, se presentarán servicios bajo la modalidad “de emergencia” en el ámbito de la Capital como consecuencia de la crisis que afronta el sector y de la imposibilidad de cubrir costos operativos.
La entidad consignó que se procederá a “la reducción de la prestación del servicio a la mínima expresión” y a “la suspensión, por dicha causa, del personal de conducción”, todo esto, por tiempo indeterminado. En caso de que se mantenga este escenario, estas disposiciones “se extenderán a las líneas provinciales en general”, dijo AETAT.
El problema del transporte público de pasajeros lleva muchísimo tiempo. Cada mes, la población usuaria se encuentra con una amenaza de paro o directamente con la realización del mismo, con todo el perjuicio que ello conlleva. Y entonces, sale el Gobierno a “salvar” a los empresarios transfiriendo dinero para que paguen sueldos o aguinaldo.
Datos para tener en cuenta el tipo de transporte que existe en Tucumán (La gaceta en base a un informe que la Municipalidad capitalina realizó en esta nueva gestión): las 14 líneas urbanas que explotan el servicio cuentan con 414 coches. De esa cifra, 137 (33%) son unidades vencidas (superan los 10 años de antigüedad). Algunos de los rodados son modelo 2008, es decir, que cuentan con 15 años. Otras tienen 12, 13 y hasta 14 años. Las unidades más viejas las tiene la Línea 3 (la totalidad de su flota, 26 coches).
De las 414 unidades circulando, solo 340 cuentan con validadoras de tarjetas (Ciudadana, Metropolitana). Del total de ómnibus, solo 44 cuentan con rampas para sillas de ruedas (10%) y 172 cuentan con aire acondicionado (41%). Todas las líneas cuentan con dispositivos geolocalizados (GPS). Hay que recordar que la ordenanza de Transporte de San Miguel de Tucumán (N° 400, de 1979) establece que la flota no puede tener una antigüedad superior a los 10 años. En 2015, se fijó la obligación de que todas las unidades nuevas sean climatizadas (ordenanza N° 4.766). Se otorgó un plazo de 10 años (2025).
Sigue: las 14 líneas del servicio público de pasajeros se encuentran con la concesión caducada. Según el Boletín Oficial de la Provincia de Tucumán, a fines de 2023 depositó en la cuenta de AETAT (dueños de los colectivos) casi MIL MILLONES DE PESOS. $260.947.133 en concepto de Programa “Boleto Gratuito de Transporte Público para Jubilados”, por los meses de Octubre y Noviembre. $700.000.000 en concepto de anticipo correspondiente al mes de enero de 2024 de los subsidios provinciales. $20.000.000 en concepto de aporte adicional.
Con todo lo expuesto y resaltando que ninguna línea se encuentra en condiciones legales de explotar el servicio, alguien del Gobierno de Tucumán podría explicar al ciudadano por qué no se resuelve de raíz y de manera definitiva este gran problema que es el transporte público de pasajeros.