“Pozo del Pescado”, donde el milagro es una realidad
La ciudad de Trancas se encuentra a unos 70 kilómetros de San Miguel de Tucumán (60 minutos más o menos) por la Ruta 9. A tres kilómetros de esa ciudad se podrá encontrar un lugar sagrado, famoso por sus aguas sanadoras: “Pozo del Pescado” o “Pozo de San Francisco Solano”.
Un lugar de mucha paz. Silbidos de las aves se mezclan con el tintinear del agua. Se observa una laguna entre la vegetación.
El milagro del Santo: San Francisco Solano tenía afinidad con los animales, talento musical y una facilidad sorprendente para obrar milagros. El franciscano estaba con un grupo de la tribu de los Choromoros, cuando sobrevino una sequía que los hubiera obligados a emigrar, de no ser porque el Santo clavó su bastón en la tierra, haciendo que brotara un manantial, el mismo que hoy alimenta la laguna ubicada en el predio del oratorio.
Es un lugar que atrae al turismo religioso. La tradición que siguen los creyentes cuenta que San Francisco Solano intercede en tres pedidos que le hagan a las personas que lo visitan por primera vez. En el lugar, el paso obligado es tirar de una cuerda que pende desde el campanario de la pequeña capilla. Un poco más adelante, un gran manantial de agua forma una extensa laguna que desborda en la zona más baja.
Muchas personas dieron testimonio de haberse mojado con el agua del lugar en zonas enfermas y haberse curado.
Los devotos del Santo se dividen entre quienes lo recuerdan los días 14 de julio, mientras otros tantos lo hacen cada 24. Lo cierto es que este paraje turístico de Trancas, cada vez que llegan estas dos fechas, recibe una visita extra a la habitual.
Creer o reventar. Llegate al lugar y experimentá personalmente la sensación.
