Vive en San Rafael y se impuso con un proyecto que une inteligencia artificial y un fin solidario. Durante dos años estará en un centro de formación en Francia. Su sueño de hacer el viaje de egresados
A Valentino Profumo le regalaron su primera computadora cuando tenía tan solo tres años. No sabía leer ni escribir y su abuela, maestra de primaria, le armaba cartones con las palabras que necesitaba para encontrar sus juegos preferidos y él las copiaba una por una en el teclado.
Quince años después, ese nene que tipeaba guiado por cartones fue seleccionado entre 18.000 postulantes de todo el mundo para una Beca Internacional de Meta, la empresa de Mark Zuckerberg. Es el primer argentino en conseguirlo. Hoy sueña con viajar a Bariloche con sus compañeros de curso, aunque su familia no tiene los medios para pagar el viaje.
Valentino no fue abanderado, ni tuvo el mejor promedio de su curso. El año pasado, incluso, se llevó una materia (Matemática en inglés) en el Colegio Del Carmen, un secundario bilingüe de San Rafael donde estudia bachiller en Informática.
“Siempre fui un alumno regular, pero destacaba en computación. Desde chico me interesó lo técnico, y lo fui estudiando por mi cuenta”, confiesa el joven estudiante, que desde abajo construyó su propio camino con una profunda vocación autodidacta.
Lo suyo es la disciplina y la obsesión por el conocimiento. Valentino aprendió a programar navegando en foros, mirando tutoriales, explorando tecnologías por su cuenta. Supo de la Beca por un video en YouTube y se postuló sin esperar demasiado.
“Lo primero que hice fue enviar un mail diciendo cuáles eran mis habilidades, qué tecnologías manejaba y por qué era un candidato ideal. Me aceptaron y después lo que siguió fueron unas pruebas de lógica y de programación”, cuenta el joven.
Luego, el proceso siguió con una entrevista y un proyecto guiado. Ya en la última etapa quedaban tan solo 10 estudiantes y el desafío final consistió en presentar un proyecto propio en menos de un mes.
“Hice una inteligencia artificial para personas con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). Ofrece herramientas como organización de horarios, alarmas que no se apagan hasta que se completa una tarea, y una comunicación más pausada. Quería hacer algo que ayudara”, explica Valentino.
Mientras otros presentaban herramientas brillantes, él fue el único que pensó en una propuesta con fines sociales. También fue el único en sacar 100% en ambas pruebas técnicas. Su desempeño fue tan sólido que terminó entre los diez finalistas del mundo, y finalmente ganó.
“Uno de los requisitos era compartir los valores de Meta. Noté que de los diez proyectos que se presentaron, el mío tenía como propósito ayudar. Los demás si bien estaban muy buenos, eran solo demostrativos de lo que podían hacer”, dice Valentino.
Ahora tiene por delante dos años de formación en Francia, en un centro académico creado por Meta. Puede elegir si viajar en 2026 o 2027, y mientras tanto aprende francés. Incluso, una chica de Guaymallén le ofreció clases gratuitas al conocer su historia.
El sueño del viaje de egresados
Valentino, como cualquier adolescente que termina el secundario, tiene la ilusión de su viaje de egresados. Vive en Cuadro Nacional, San Rafael, junto a su mamá, que trabaja como celadora, y su abuela jubilada. Ellas dos fueron su sostén desde siempre, las que lo criaron y lo impulsaron a soñar en grande.
“Mi vieja es mi ejemplo. Siempre la vi trabajar de lo que sea. Doble turno, bartender, moza, intentando abrir sus negocios. Nunca paró. Siempre dije que si quiero hacer algo, lo tengo que hacer con mis propios medios, laburando, sin saltar nada ni tomar ventaja. Y mi abuela es mi otra madre. Me crió. Mi vieja laburaba todo el día y llegaba agotada”, cuenta.
En medio de este frenesí, Valentino carga con una preocupación. Mientras se prepara para mudarse a Francia con la Beca que ganó, su familia no puede pagar el viaje de egresados que realizará en diciembre. El valor es cercano a los 2.800.000 pesos. Hasta ahora, pudo juntar poco más de 600.000 entre ahorros y donaciones, que recibe en sus alias valentinoprofumoJRR y Valentinoprofum.uala.
Con información de María Florencia Miozzo, de Clarín