Una investigación federal destapó una presunta red que operaba desde Tucumán y abastecía el mercado ilegal con destino a Chile
Una causa judicial de alto impacto volvió a poner a Tucumán en el centro de una investigación por tráfico internacional de armas. La pesquisa, impulsada por la Justicia Federal, involucra a siete personas domiciliadas en la provincia, sospechadas de integrar una organización dedicada a la venta ilegal de armamento con proyección internacional.
La investigación se inició en diciembre de 2023, cuando personal de Gendarmería Nacional interceptó un colectivo de larga distancia en la localidad de Aguilares. Durante el control, dos ciudadanos chilenos que viajaban rumbo a Mendoza fueron requisados luego de evidenciar una actitud sospechosa. En su equipaje se encontraron ocho pistolas calibre 9 milímetros y 13 cargadores, sin documentación que avalara su tenencia ni traslado.
De un operativo aislado a una red organizada
Lo que en un primer momento parecía un caso puntual derivó en una investigación mucho más amplia. Con el avance de las pericias y el análisis de la trazabilidad de las armas secuestradas, la fiscalía logró reconstruir un circuito ilegal que comenzaba en Tucumán y tenía como destino final Chile.
Según la acusación, las armas habían sido adquiridas en forma irregular a través de maniobras fraudulentas, utilizando personas registradas como legítimos usuarios pero que no contaban con ingresos ni perfiles compatibles con la compra de ese tipo de armamento.
El rol clave de una armería tucumana
Entre los investigados se encuentran empleados de una armería local, quienes habrían facilitado la operatoria ilegal. La hipótesis judicial sostiene que desde el comercio se habrían concretado ventas simuladas, inscribiendo armas a nombre de terceros para luego desviarlas al mercado negro.
El esquema se completaba con intermediarios que se encargaban de la entrega del armamento y la logística del traslado, evitando controles más estrictos, especialmente en pasos fronterizos.
La venta y el intento de cruce internacional
La Fiscalía determinó que la operación de compraventa se concretó el 18 de diciembre de 2023 en la Plaza Alberdi, en San Miguel de Tucumán. Tras recibir las armas, los compradores chilenos abordaron un micro rumbo a Mendoza, desde donde planeaban cruzar la frontera por vía terrestre, un método habitual para evadir controles aeroportuarios.
El plan se frustró con el operativo de Gendarmería, que permitió desarticular el traslado y dar inicio a la causa.
Allanamientos y situación procesal
Un año después, en diciembre de 2024, la Justicia ordenó una serie de allanamientos en el Gran San Miguel de Tucumán y en el interior provincial. Durante los procedimientos se secuestraron armas, municiones, dinero en efectivo y documentación considerada clave para el expediente.
Por el momento, los siete tucumanos involucrados no fueron procesados, aunque deberán enfrentar declaraciones indagatorias en los próximos días. Dos de los acusados vinculados directamente al transporte de las armas permanecen detenidos en una cárcel federal, imputados por acopio de armas con fines de tráfico.
Una causa que expone una problemática mayor
El caso vuelve a encender alarmas sobre el tráfico ilegal de armas en el Norte Argentino y la facilidad con la que armamento adquirido legalmente puede terminar en manos del crimen organizado, incluso cruzando fronteras.
Mientras la investigación avanza, la Justicia busca determinar responsabilidades y establecer si se trata de una red con mayor alcance del que hasta ahora se conoce.
Con información de Gustavo Rodríguez de La Gaceta
