En su primer mensaje, pretende detallar la herencia recibida y administrar la expectativa
En siete días asume la presidencia argentina Javier Milei. Está previsto que dentro del Congreso, donde jurará y recibirá los atributos de mando de parte de Alberto Fernández (actual presidente para los que no se acuerden), brinde un mensaje breve. Lo más fuerte será el acto en la calle, frente a los ciudadanos que se acerquen a participar del acto. Pocas palabras a “la casta” y las principales definiciones frente a la gente a la que, durante la campaña, prometió “devolverle el poder”.
Milei va a informar con “lujo de detalles” el estado con el que recibirá las cuentas públicas. “Vamos a ser muy explícitos respecto de lo que es la herencia; les vamos a contar a los argentinos con lujo de detalles el desastre que deja plantado este Gobierno que, encima, ni siquiera da la cara de hacerse cargo por los daños causados”, dijo Milei.
El otro punto, tendrá que ver con “administrar la expectativa”. Hacer hincapié en que no va a ser fácil y que la inflación va a tardar en bajar. “Plantear que ni el Banco Central se va a cerrar el 11 de diciembre ni la dolarización va a ser el 4 de enero”, sintetizan.
La ceremonia de juramento será a las 11 horas del domingo 10 de diciembre. Ahí dará un mensaje a la Asamblea Legislativa. Lo relevante es lo que el presidente va a decir a la gente convocada afuera. Desde allí irá a Casa Rosada donde le tomará juramento a los ministros. Luego, en la Catedral participará del Tedeum, que será de carácter interreligioso. Habrá oraciones católicas, del judaísmo, musulmanes y protestantes. Para la noche, está previsto una función especial en el Teatro Colón.
Al día siguiente de la asunción, se enviará al Congreso de la Nación una batería de proyectos de ley para ser tratadas en sesiones extraordinarias. Las leyes serán para desregular la economía, cambiar la estructura tributaria, modernizar el ,mercado laboral y hacerlo más flexible.
