La joven era conocida por los procedimientos extremos a los que se sometió en todo su cuerpo
La influencer, conocida como María Magdalena, fue hallada muerta en un hotel de Tailandia tras caerse del balcón de un noveno piso del edificio Patong Tower. Tenía 33 años y se había sometido a cirugías extremas desde los 21.
Su verdadero nombre era Denise Ivonne Jarvis Gongora, y el martes 9 de diciembre se había registrado para una estadía de una noche en el condominio de gran altura.
Unas horas después de que la modelo mexico-canadiense subiera a su habitación, el personal del hotel descubrió su cuerpo en el área de estacionamiento a la 1:30 P.M.
Los restos de la joven fueron trasladados al Hospital Vachira Phuket para realizar una autopsia completa y determinar la causa del fallecimiento.
“MaryMagdaleneDied”: el último mensaje y el cambio en su cuenta de Instagram
La influencer tenía dos cuentas de Instagram, una destinada a sus obras de arte como artista plástica, y la otra para publicar contenido diario.
“Alguien que me quiera por favor”, había escrito en el epígrafe de uno de sus últimos posteos. Como solía compartir frases crípticas, sus seguidores no se alarmaron, pero ahora aquel mensaje podría tomar un desolador significado que demostraría cómo fueron sus últimas horas con vida.
Luego de eso cambió su nombre de usuario en su perfil principal, que originalmente era “@mary853magdalene”, a “MaryMagdaleneDied”, cuya traducción literal es “MaryMagdalenemurió“.
Además publicó un meme de la escena final de la película The Truman Show, donde el personaje interpretado por Jim Carrey, Truman Burbank, hace una reverencia y se despide con la frase: “Y en caso de que no los vea, buenas tardes, buenas noches”.
Ese último posteo fue acompañado de una foto de ella misma de la infancia, antes de todas las cirugías. Horas más tarde los medios británicos The Sun y Daily Mail confirmaron su fallecimiento, tras consultar a las fuentes policiales.
La trágica historia de vida de Mary Madgalene
Mary superaba el medio millón de seguidores, y había dado sus primeros pasos en OnlyFans antes de dedicarse al arte plástico como escultora y pintora
En diálogo con el podcast No Jumper había contado que creció en una familia estrictamente religiosa, y que cuando era niña le prohibieron ver películas de Disney.
“A los 12 años me revelé, y empecé a tener una vida salvaje y peligrosa, siendo sexualmente activa desde entonces y a consumir drogas”, confesó.
“Consumía cocaína e iba borracha a la escuela en octavo grado”, lamentó. A los 17 años empezó a trabajar como stripper, y luego como acompañante sexual.
Después de volverse viral en Internet por sus cirugías plásticas, monetizó su fama en un perfil de OnlyFans. “Pude dejar de bailar y de ser acompañante, lo cual me deprimía, y pude vivir solo de eso, de compartir mis fotos y videos”, contó.
A los 21 años se sometió a un aumento de senos en México con un dentista local que no era cirujano, y el procedimiento salió mal. Sin embargo, recurrió a otra operación para corregirla, y luego siguió con levantamientos de cejas, transferencias de grasa, liposucción en rostro y cuerpo, múltiples modificaciones de nariz, carillas, cirugía de ojos de gato, inyecciones de glúteos, entre otras.
En 2018 pasó por el quirófano para una operación para modificar el tamaño de su vagina. “Casi muero durante el procedimiento, tuve que recibir dos transfusiones de sangre, y quedé desfigurada en el área genital así que me hice otra vaginoplastia más adelante”, indicó.
Ella misma reconocía que varias de las cirugías que se hacía eran ilegales, y viajaba por el mundo en búsqueda de pasar por el quirófano. En 2022 reveló que ya no podía cerrar la boca debido a tantas inyecciones en los labios.
A principios de 2023 quedó temporalmente con un solo pecho después de que uno de sus implantes de tamaño 38J explotara. Aunque no confirmó la causa, había revelado que utilizaba expansores, es decir que rellenaba ella misma sus implantes con solución salina para tenerlos “lo más grandes posibles”.
En 2025 casi se quedó ciega después de tatuarse los globos oculares de color azul y amarillo. Más de una vez manifestó su arrepentimiento y deseo de volver a una apariencia más natural, y mostraba fotos antiguas de su adolescencia.
En una emotiva publicación que data de 2023, admitió que había quedado “atrapada en un ciclo interminable” y que constantemente pasaba por el bisturí para arreglar procedimientos fallidos.
“Ya no es una pequeña aventura divertida, es simplemente agotador en todos los sentidos posibles. Me agota el tiempo, la cuenta bancaria, la energía, la salud, y a la larga, termino hundiéndome en un agujero muy caro que me quita mucho tiempo”, había dicho.
