El gobernador de Buenos Aires, en tono electoral, logró amontonar al peronismo de su provincia para hablar de política y no propuso una medida para combatir la inseguridad
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, salió al cruce del Presidente Javier Milei luego de que pidiera su renuncia para intervenir la provincia. Y no estuvo solo, sino que se mostró acompañado por intendentes, funcionarios, legisladores y otros referentes del peronismo.
“La provincia de Buenos Aires no se somete a amenazas ni extorsiones”, aseguró el Gobernador en conferencia de prensa. Y cargó contra el Presidente: “Es el responsable del narcotráfico”.
En la misma línea, Kicillof señaló que “el incremento de la violencia y el crimen está hoy asociado al narcotráfico. Y la provincia no produce drogas. Para llegar, tiene que atravesar fronteras nacionales y es responsabilidad de Nación”.
“No se dio cuenta de la enorme gravedad que tiene amenazar a una provincia con una intervención”, continuó el Gobernador. Y aseguró: “Su mensaje no es digno de un Presidente de la Nación”.
Hizo hincapié en que Milei “viene de gobernar y poner jueces por decreto”, al tiempo que destacó: “Quiere intervenir una provincia donde perdió las elecciones”.
“Milei debería tener muy en claro que más allá de las diferencias políticas, hay consensos que no se tocan, la democracia, el federalismo y la Constitución”, manifestó Kicillof. Y advirtió: “No va a atropellar la democracia ni la provincia de Buenos Aires. Milei es Presidente de la Nación pero no gobierna ninguna de las 23 provincias. Los gobernadores y los intendentes no son sus empleados”.
Todo discurso electoralista para su público. Ni una mención a las víctimas de inseguridad que mueren día a día. Ni una mención de cómo trabajará para combatir la inseguridad.