El diario digital SIN CODIGO TUCUMAN conversó con el Dr. Alfredo Aydar un buscador incansable de Justicia y, además, de gran solidaridad social
Cada 29 de agosto se celebra, en Argentina, el Día del Abogado. Esto es en conmemoración del nacimiento, en 1810, del jurista, ensayista y político Juan Bautista Alberdi.
Alberdi nació en la ciudad de San Miguel de Tucumán el 29 de agosto de 1810. El economista , autor intelectual de la Constitución Nacional de 1853, falleció a los 74 años, el 19 de junio de 1884.
El 19 de diciembre de 1958, la Junta de Gobierno de la Federación Argentina de Colegios de Abogados aprobó por unanimidad el día 29 de agosto de cada año como fecha en que naciera el insigne Juan Bautista Alberdi.
El abogado Alfredo Aydar nació en Guasayán, Santiago del Estero. Estudió y ejerce en Tucumán. Tiene una frase que dice. “Donde no hay Justicia, es peligroso tener Razón”. Y eso quizás resume su trabajo diario como abogado, donde tiene causas no sólo en Tucumán sino en Santiago del Estero, Catamarca, La Rioja, Buenos AIres, entre otras ciudades. Actualmente, lleva una causa en la provincia de Catamarca donde toca intereses del poder local. Eso llevó a enfrentamientos tanto con el Gobierno de esa provincia como con ciertos “peces gordos” del lugar. Lejos de amedrentarse y “recular”, Aydar sigue adelante con la causa a pesar de diferentes amenazas recibidas, al día de hoy, para que deje de investigar.
Alfredo Aydar denuncia el embate de la Justicia Federal de Catamarca, que con una causa armada, pretende limitar su labor profesional. Las causas de estafas en esa provincia desnudan un escándalo judicial, político y hasta clerical que lo relaciona como un gran encubrimiento en la historia de las estafas piramidales.
Además, el abogado tiene una actividad solidaria de más de 10 años con la Agrupación Tucumán Solidario ayudando a comedores y merenderos de la provincia. Hace 3 años fue noticia por poner en venta su auto BMW para poder comprar mercadería para los comedores que apadrina en los barrios populares. “Lo hago porque lo siento, no puedo mirar para otros lado”.
Alfredo se define como un hombre independiente donde no tiene”pelos en la lengua” para criticar lo que hay que criticar y agradecer cuando hay que agradecer.
“Lo que tengo me lo he ganado laburando. ¿Cómo no voy a devolverle algo a la sociedad?. Si hay gente que la pasa mal y le puedo dar una mano cómo no lo voy a hacer”.
Viene de una familia de laburantes y él mismo trabajó en el campo, de mozo, como portero de boliche, etcétera y con sacrificio logró ser un gran profesional .
Con su historia quisimos homenajear a todos los abogados que trabajan por una justicia independiente.
