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Para muchos apostadores, ganar un premio en la lotería representa la oportunidad de nunca más tener que trabajar en su vida, un sueño de independencia financiera. Sin embargo, otras personas prefieren seguir con su vida “normal”, tal como sucedió con un profesor que, pese a haber ganado 2 millones y medio de dólares, decidió seguir trabajando. 

El afortunado ganador fue Mike Law, ciudadano de Worcestershire, Inglaterra, quien obtuvo gracias a la lotería la abultada suma de 2 millones de libras (equivalente a 2 millones y medio de dólares aproximadamente). Pero, a pesar de las comodidades que el dinero podría haberle proporcionado, sorprendentemente y por una emotiva razón, optó por continuar su vida laboral.

En octubre de 2021, él y su esposa, Andrea, se hicieron acreedores del gran premio del “Lotto Lucky Dip”, un hecho que marcó un cambio definitivo en sus vidas. Sin embargo, en su caso, los valores y aspiraciones personales del hombre prevalecieron por encima de la tentación de cualquier tipo de lujo.

“Para mí, ganar la lotería nacional no se trata de tener autos y lanchas rápidas, se trata de oportunidades y de crear recuerdos”, explicó Law recientemente en una entrevista con el diario The Sun. 

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El hombre, profesor de artes y fotografía, optó por mantener sus clases en la escuela secundaria hasta hace unas semanas. A los 52 años, Mike compartió que su razón para permanecer en el aula fue su deseo de garantizar que sus estudiantes completaran sus exámenes de GCSE a principios de este año para finalizar la secundaria. 

Tras ganar la lotería y cumplir su objetivo en con sus alumnos, Law confirmó su retiro

“Se me ha dado esta oportunidad y soy muy afortunado de poder intentar hacer de una pasión de larga data: mi trabajo”, expresó Law a corazón abierto, al tiempo que aseguró que pasó por “años difíciles”, perdiendo a su madre y a familiares cercanos justo antes de ganar. 

En ese sentido, expresó: “Me di cuenta de que la vida es muy corta y se me había dado una oportunidad inesperada”.

Sin embargo, ahora, después de más de dos décadas dedicadas al ámbito educativo, Mike tomó la decisión de despejar su escritorio. Su plan es utilizar el dinero ganado para escribir y publicar un libro sobre el cementerio medieval anglosajón, Sutton Hoo. A pesar de su pasión por su nuevo proyecto, este apasionado educador reconoció que echará de menos la enseñanza porque todavía es “parte” de él.

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La afortunada pareja compartió que sus vidas se han mantenido prácticamente iguales incluso después de acertar los seis números afortunados. “Somos prácticamente la misma familia normal. Ya no tenemos la preocupación de una hipoteca, lo cual es un gran alivio, pero queremos permanecer con los pies en la tierra”, dijo a The Sun la señora Law. 

“Sí nos hemos dado algunos caprichos, hemos estado de viaje en Laponia, un sueño que tenía desde que tuvimos a los niños, pero no mucho más”, revelaron./crónica

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