Es inadmisible que los intendentes sean rehenes del gobierno de turno. Que las palabras de Jaldo no queden solo en promesa porque empezará a desgastarse antes de comenzar
Debido a denuncias por parte de intendentes opositores al gobierno de Tucumán entre ellos: Mariano Campero (Yerba Buena), Alejandro Molinuevo (Concepción) y Sebastián Salazar (Bella Vista), por la distribución dispar y discrecional de fondos a los municipios, el gobernador electo, Osvaldo Jaldo, se expresó al respecto. Advirtió que, durante su gestión, los jefes municipales deberán administrarse con sus recursos. “Se van a acabar este tipo de discusiones ´si me das de más, si me das de menos´”.
Jaldo dijo que en su gobierno se van a producir “modificaciones importantes# en la relación Provincia-Municipio. “vamos a tomar decisiones de fondo para que cada uno se maneje con los recursos (nacionales y provinciales) que por Ley y Constitución le corresponde”.
El vicegobernador actual advirtió a los jefes municipales que correrá por su cuenta el saber administrar de modo adecuado para poder llegar a fin de mes. A partir del 29 (de octubre) todos nos vamos a tener que esforzar para administrar cada una de las instituciones para las cuales la gente nos votó. Tenemos la obligación de dar respuestas concretas en materia salarial, de servicio y de obra pública. Cada uno lo va hacer con los recursos que por Ley y Constitución le corresponde”.
Campero, Molinuevo y Salazar, junto al diputado nacional Roberto Sánchez, denunciaron que el Gobierno los discrimina por ser Juntos por el Cambio y les envía menos recursos a través del “Pacto Social”. Remarcaron que otros distritos de menos categoría o con menos población son mucho más favorecidos por ser de signo oficialista. También, cuestionan el no haber recibido nada de los 12 mil millones de pesos de fondos no reintegrables que desembolsó la Provincia en lo que va de 2023, mientras que distritos como Burruyacu fueron favorecidos con $1.880 millones.
Podrá cumplir Jaldo con su palabra. Sería bueno que sí, para la salud institucional de su gobierno y la credibilidad con la ciudadanía. Caso contrario, su poder comenzará a diluirse muy rápido.
