Con austeridad, sin aparatos y poco dinero enfrentó sola a todo el aparato nacional, imponiéndose en cada distrito nacional
Mientras su contrincante, Horacio Rodríguez Larreta, sumaba apoyos de dirigentes a lo largo y a lo ancho del país, ella caminaba tranquila pero sin pausa cada rincón argentino. Le decían “vas a perder, mirá todos los dirigentes que está sumando Horacio”. A ella no le importó y jamás perdió la confianza. Y así le fue: ganó en todos los distritos, incluso en CABA donde gobierna Horacio.
“Me parece que lo que viene en Argentina es un cambio que va a necesitar mucho coraje, mucha valentía”, asegura Bullrich.
En su paso como ministra de Seguridad nacional luchó activamente contra el narcotráfico y se “bancó” la muerte de Santiago Maldonado, donde quisieron (desde el kirchnerismo) mostrarlo como una desaparición por parte de Gendarmería, algo que quedó demostrado que no fue así.
Javier Milei y Patricia Bullrich tienen discursos muy parecidos. Interpretan lo que la gente está necesitando. En la humilde opinión de este editor, la opción en las próximas presidenciales está entre ellos dos. Es lo que manifestó el pueblo en las PASO: ambos sumaron alrededor del 60% de los votos.
Qué bueno sería para el país que si gana Milei la sume a Bullrich y viceversa.
Señor Milei, Patricia no es su enemiga. Señora Bullrich, Javier no es su enemigo. A quien hay que vencer es al populismo/kirchnerismo que, aunque salieron tercero, no están muertos. ¡Cuidado!.
