El pasado se resiste a desaparecer. La reedición de lo malo conocido. Sin caras nuevas, sin proyectos innovadores. Con la misma receta que llevó a la Argentina a la decadencia
Por SIN CODIGO
No hay poder divino que ayude a que tres personajes nefastos de la política argentina den un paso al costado. Sergio Massa -el “panqueque”- que produjo el mayor derroche de plata y aceleración de la inflación que se recuerde en décadas. Axel Kicillof -el “incompetente”- culpable de los USD 17 mil millones que debe pagar YPF, gobernante de la provincia más corrupta e insegura de Argentina. Máximo Kirchner -el “Señor Playstation”- cuyo único ¿mérito? es ser hijo de Néstor y Cristina. Esos tres personajes, que tanto mal hicieron al país, pretenden rejuntarse para “salvar” a la Patria de las consecuencias que ellos mismo causaron. Así de loco es éste país.
Obligados a unirse -tapándose la nariz, obvio- no por el bien del país, sino por instinto de supervivencia. Porque no son capaces de soltar la “Teta del Estado” -y todo lo que eso implica-. Son ambiciosos, antidemocráticos -porque no aceptan que perdieron las elecciones y hacen todo lo posible para que Javier Milei caiga-. Están desesperados porque se les cerró varias cajas que les permitía hacer política partidaria -¿y negocios?- con la nuestra, porque ellos no ponen ni una.
Este martes se juntaron en La Plata para ir juntos en las próximas elecciones nacionales. Primero la alianza electoral. Luego, vendrá la pelea con los nombres.
Lo más triste, o gracioso, es que se odian, se desconfían, pero LOS UNE EL ESPANTO.
