Pensamientos como los de Bussi atrasan y son típicos de sociedades cavernícolas e hipócritas
Ahora están de moda los seudo políticos que hablan cualquier barbaridad y en las redes sociales les festejan, son graciosos. Lamentablemente, Argentina necesita evolucionar y hay problemas tan serios que, lo que menos necesita el país hoy, son personas sin preparación, sin compromiso y que lejos de tener soluciones de fondo dicen “gansadas” con tal de ganar “likes” en las redes sociales.
La Ley de Cupo Laboral para Personas Travestis, Transexuales y Transgénero prevé condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo, protección contra el desempleo, sin discriminación por motivos de identidad de género o su expresión. Las personas deberán ser idóneas para el cargo. En ningún lado la Ley habla de tomar a cualquier travesti para un cargo ejecutivo.
Es una realidad que en este país los prejuicios están al orden del día, ¿quién toma un travesti en su negocio?, muy pocos. Sociedad hipócrita, porque si se indaga en la vida personal de muchos políticos, habría más de una “sorpresa”.
Es sabido que los travestis son discriminados y, en muchos casos, deben dedicarse a la prostitución para sobrevivir, salvo pocas excepciones.
Quizás el señor Bussi habla de esa manera por dos motivos: porque quiere imitar al “León” Milei que con exabruptos ocasiona empatía en adolescentes y jóvenes; por otro lado, Bussi si tuviese un familiar travesti no le haría falta buscar trabajo porque él y su familia tienen plata para toda la vida.
A la hora de votar, ojalá la gente piense muy bien a quién quiere pagarle un sueldo millonario del Estado. Diputados que no hacen nada por la gente y viven como príncipes. ESOS CARGOS SON OCUPADOS POR MUCHOS QUE NO TIENEN IDONEIDAD Y LOS SUELDOS SON PAGADOS POR LOS IMPUESTOS DE LA GENTE, o sea, CON LA TUYA.
