Zarlenga chocó y le causó la muerte a dos rondines. Desde entonces está en prisión domiciliaria
Armando Zarlenga seguirá en prisión domiciliaria hasta que se realice un juicio abreviado o sea sometido a un debate oral el año que viene.
El 25 de abril pasado, Zarlenga les causó la muerte a Maximiliano Saldaño y a Joaquín Franck Colombres al embestir su camioneta con la moto en la que se trasladaban las víctimas por Avenida Mate de Luna. Los estudios realizados al acusado dieron cuenta de que conducía alcoholizado. El deportista está detenido desde la fecha al presente.
El fiscal Pedro Gallo lo acusó de homicidio culposo por la conducción imprudente y antirreglamentaria de una camioneta, triplemente agravado por la pluralidad de víctimas, por nivel de alcoholemia superior a un gramo por litro de sangre y por exceso de velocidad de más de 30 kilómetros por encima de la máxima permitida. Solicitará una pena de cinco años (la máxima es de seis).
Los querellantes no compartieron la opinión del fiscal y solicitaron que sea enjuiciado por homicidio culposo con dolo eventual y anticiparon que solicitarán que se le dicte una pena de 12 años.
Los defensores del imputado plantearon que no había riesgos procesales para que Zarlenga siguiera detenido. Señalaron que la investigación ya estaba cerrada y que durante los casi siete meses en los que estuvo privado de su libertad tuvo una conducta ejemplar. El juez facundo Maggio le terminó dando la razón a los defensores y ordenó que Zarlenga quedara en libertad. Para ello, deberá fijar una caución real de 20 millones de pesos, no podrá ausentarse de la provincia y del país (debe entregar el pasaporte), no acercarse a las familias de la víctima y presentarse ante las autoridades periódicamente para demostrar que cumple las medidas.