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Tras el frágil desempeño del Presidente Joe Biden, en el debate, frente a Donald Trump, crecen las presiones para que se “baje” de la candidatura, incluso desde la prensa amiga

Apenas acabó el debate entre los dos candidatos a la Presidencia en Estados Unidos, el jueves pasado, se encendió un fuerte reclamo entre las filas demócratas para que Joe Biden abandone la carrera por la reelección presidencial y se nomine a otro aspirante para competir en las elecciones del 5 de noviembre contra Donald Trump. ¿Es posible a esta altura?. ¿Quién puede ocupar su lugar?.

El desempeño del Presidente, de 81 años, disfónico, falto de reflejos y protagonista de algunas incoherencias que llenaron de memes las redes sociales, dejó en pánico a representantes del partido, que vieron que un Trump más enérgico y vivaz -aunque esgrima falsedades y exageraciones todo el tiempo- puede enterrar a Biden y al partido.

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En un intento de frenar los rumores y diluir los lapidarios títulos de los diarios de este viernes, Biden dijo que no renunciará. “Amigos, sé que no soy un hombre joven, para decir lo obvio”, dijo Biden al cerrar su discurso en un acto en Carolina del Norte, este viernes.

“Ya no hablo tan claro como antes. Ya no debato tan bien como antes -admitió el mandatario-. Pero sé lo que sé. ¡Sé decir la verdad! ¡Sé cómo hacer este trabajo! ¡Sé cómo hacer las cosas! ¡Sé cómo millones de estadounidenses saben que cuando te derriban, te levantas!”, disparó y dijo que ganará las elecciones en noviembre.

Cambiar de candidato en medio de la competencia no es un escenario imposible. Pero para que esto suceda Biden debería renunciar, algo que por ahora no parece estar dispuesto a hacer. Su nominación -que suele ser un trámite formal- aún no ha sido consolidada y debe hacerse en la Convención Nacional Demócrata en agosto.

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Un escenario ligeramente más probable sería que figuras de alto rango dentro del partido, presionen a Biden para que renuncie, lo que significaría que sus delegados serían libres de votar por quien quieran en la convención.

“Si Biden anunciara su retiro pronto, varios candidatos pondrían sus nombres en el ring. Incluso podría haber debates antes de la convención para que cada una de estas personas pudiera ser vista en horario de máxima audiencia”, comentó un experto en Ciencias Políticas de la Universidad de California.

¿Quién podría reemplazarlo?

Las especulaciones sobre quién podría suceder a Biden, si renuncia a la candidatura, crecen. Siempre surge el nombre de Michelle Obama (la demócrata que bate récords de popularidad), pero ya ha dejado en claro varias veces su intención de jamás postularse.

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La vicepresidente Kamala Harris; el gobernador de California, Gavin Newsom; la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer; y el gobernador de Illinois, J B Pritzker, se barajan como posibles candidatos, pero no hay una personalidad clara que asome y que tenga chances de ganar a Trump si Biden dimite.

El problema con ellos es que son prácticamente desconocidos para el público en general. Y faltan poco más de cuatro meses para las elecciones: demasiado poco tiempo para la construir un candidato que tenga chances de ganar.

Sin embargo es posible que, moderado el pánico inicial tras el debate, los demócratas no tengan mejor opción que volver a apostar por Biden que, más allá del paso en falso del jueves, es un político experimentado y tozudo, que ya ha logrado renacer de las cenizas (en 2020 prácticamente tenía perdida su nominación contra Bernie Sanders y remontó a último momento) y fue el único que pudo ganar a Trump. Quizás no pueda, no tenga la capacidad y la energía. Pero Biden sin dudas hará todo lo humanamente posible para remontar el papelón del debate.

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Vale recordar que el ex Presidente y actual candidato republicano a la Presidencia, Donald Trump, en mayo pasado, un jurado popular lo declaró culpable de 34 delitos. Esta situación lo convierte en el primer Presidente o ex Presidente, de Estados Unidos, en ser condenado en un Juicio Penal.

Con información de Paula Lugones, corresponsal Clarín en EE.UU.

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