La droga, el alcohol, el desequilibrio mental o todo mezclado hace que la sociedad actúe, cada vez más, como un animal irracional con gran capacidad de hacer daño o incluso matar
El sábado a la madrugada, dentro de un boliche de Hurlingham en la provincia de Buenos Aires, un joven de 19 años rompió una botella de vidrio e intentó asesinar a otro de la misma edad clavándole los restos de vidrio en la cara. El resultado fue grave: cortes profundos en el rostro, dos operaciones de más de cinco horas para reconstruirle el rostro y la posibilidad de perder un ojo.
Según las investigaciones, ambos jóvenes se conocían y el móvil de semejante salvajada fueron los celos por una mujer.
La Policía identificó a la víctima como Nicolás García, de 19 años, y al agresor como Santiago “Chanchi” Martínez, de la misma edad, quien fue detenido en su casa pocas horas después del hecho.
El dato que sorprendió a todos es que los dos tenían una amistad previa e, incluso, habían charlado minutos antes. Aparentemente el chico atacado estaba hablando con la ex novia del atacante y eso lo enfureció y por eso lo atacó.
La Justicia imputó al agresor como tentativa de homicidio agravado ´por violencia vicaria.
