Una joven denunció a un hombre a quien consideraba un “amigo cercano”
El hecho ocurrió el 4 de febrero, en una vivienda de San Miguel de Tucumán. La víctima declaró que fue abusada mientras dormía en el domicilio del acusado, a quien conocía desde hace años. La causa fue investigada por la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual.
La Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual N°2, a cargo de la Fiscal Alejandra Navarro, investigó una grave denuncia por abuso sexual presentada por F. I. G., una joven empleada de la administración pública, quien asegura haber sido atacada por un hombre al que conocía desde 2018 y consideraba parte de su círculo íntimo.
Según consta en el acta de entrevista, el hecho habría ocurrido el domingo 4 de febrero de 2024, entre las 15 y las 17 horas, en el domicilio de Axel E., donde el joven reside junto a su familia. Ese día, la mujer había sido invitada por su amigo a compartir un almuerzo con sus hermanas, un sobrino menor, y una amiga de la víctima, Milagros, de 25 años.
La víctima relató que, luego de consumir bebidas alcohólicas, se quedó dormida en una habitación de la casa, donde despertó abruptamente al sentir al agresor sobre ella, completamente desnudo. Según sus palabras, intentó resistirse, pero él la inmovilizó y, tras una serie de tocamientos no consentidos, la penetró a pesar de sus constantes negativas.
“Yo le decía todo el tiempo que no quería, que se detenga, y ni siquiera le importó. Fue una bestia. Me sentí tratada como una cosa”, declaró la víctima, visiblemente afectada durante la comunicación telefónica con la Fiscalía.
Luego del episodio, la joven se dirigió a la cocina donde estaban otras personas y, minutos después, el agresor se acercó a ella para susurrarle “perdoname, no sé qué hicimos”, asegurando que no recordaba lo sucedido. A los días, continuó enviándole mensajes pidiendo disculpas, los cuales fueron registrados por la víctima a través de capturas de pantalla, dado que el acusado utiliza una configuración en WhatsApp que elimina los mensajes tras 24 horas.
“Me mandaba mensajes todos los días pidiéndome perdón. Tengo las pruebas. Lo más duro es que había un vínculo familiar, él era como un hermano para mí. Nunca imaginé que podría hacerme esto”, afirmó.
La joven también manifestó que al comentarle el hecho a una de las hermanas del acusado, esta le confirmó que había notado una marca en el cuello del acusado, como una mordida, lo que terminó de confirmar sus sospechas sobre lo ocurrido.
En su testimonio, la víctima remarcó que demoró en realizar la denuncia porque no lograba procesar lo vivido. “Me agarró una angustia tremenda, no paro de llorar. Estoy siendo acompañada por una psicóloga y autorizo a que remita toda la información necesaria. No quiero que esto quede en la nada.”
La denunciante se mostró dispuesta a colaborar con la investigación, aceptando someterse a exámenes médicos y psicológicos, y solicitó una medida de prohibición de acercamiento contra el acusado.
La causa está caratulada como “Abuso sexual – Art. 119 párrafo 1 del Código Penal” y este jueves 10 comienza el Juicio Oral.