Las peleas baratas, las chicanas del subdesarrollo, las operetas y carpetazos pueden ser aceptables -en algún punto- entre adultos, pero meter a los niños en ideologías infundadas, NO
Por SIN CODIGO
En Tucumán, la política vuelve a ser motivo de indignación. Con el aval del vicegobernador Miguel Acevedo, y el apoyo de la Legislatura, se realizará un Encuentro Global de Infancias Trans en la provincia, el próximo 18 de octubre. La noticia, lejos de pasar inadvertida, generó un repudio generalizado en amplios sectores de la sociedad y en distintas fuerzas políticas.
La discusión traspasó las fronteras provinciales. A nivel nacional, el escritor y licenciado en ciencias políticas, Agustín Laje, se expresó en X: “GRAVÍSIMO: Abuso sexual de niños promovido por el gobierno de Tucumán. Con el apoyo de la Legislatura y del Vicegobernador Acevedo Tucumán será sede del Primer Encuentro Global “Infancias Trans”. Ese congreso busca legitimar la hormonización y mutilación sexual de niños, algo que contradice el principio de protección integral de la niñez”. También, el periodista Eduardo Feinmann que habló de una situación gravísima.
Desde Fuerza Republicana, Ricardo Bussi salió a rechazar con firmeza la iniciativa: “Los niños requieren protección, escucha y tiempo para crecer, no etiquetas prematuras ni intervenciones que puedan condicionar su desarrollo”. Mientras, desde La Libertad Avanza, Federico Pelli, también levantó la voz en contra de lo que consideran un evento inaceptable.
A favor de este encuentro, que genera rechazo en una amplia mayoría de la sociedad, está obviamente el kirchnerismo. El diputado nacional y pediatra, Pablo Yedlin, defendió el encuentro, señalando que se trata de “minorías inofensivas donde el Estado debe estar presente”, apoyando la decisión de Acevedo y de la Legislatura. En la misma línea, el legislador kirchnerista, Cristian Rodríguez, declaró: “El Estado debe estar presente para todos y más aún para las minorías”, ratificando la necesidad de garantizar políticas de inclusión y acompañamiento en diversidad.
Pero aquí surge la pregunta central: ¿inclusión a costa de qué? Estamos hablando de infancia, no de adultos. Es aberrante que se intente naturalizar debates sobre hormonización o intervenciones irreversibles en niños y niñas, cuando cualquier definición de identidad debería ser una decisión madura y personal en la adultez.
¿De qué inclusión hablan cuando lo que está en juego es la niñez? ¿Desde cuándo un niño puede autopercibirse con plena conciencia, salvo que adultos los orienten hacia ese camino? ¿Tan enferma está la sociedad, intoxicada por una ideología que confunde derechos con experimentación?
Las declaraciones confusas del legislador peronista Sergio Mansilla
“Como presidente (subrogante de la Legislatura), niego rotundamente que a ese evento (Encuentro Global de Infancias Trans) lo haga y lo banque la Cámara”, dijo Mansilla al medio La Gaceta.
“La Legislatura no va a hacer ningún evento de estas características ni va a salir ningún recurso de la Legislatura para ese evento”, comentó.
En una nota publicada, el último 25 de agosto, por la misma Legislatura de Tucumán, el vicegobernador Miguel Acevedo mantuvo una reunión con la Doctora Fabiana Reina, médica tocoginecóloga certificada en ginecología infantojuvenil y endocrinología ginecológica, quien le presentó los detalles del 1° Encuentro Global de Infancias Trans: Desafíos y Posibilidades. Un evento, sin costos y con cupos limitados, que tendrá lugar el próximo 18 de octubre en el Hotel Catalinas Park (frente al Parque 9 de Julio).
Allí, Acevedo le manifestó a Reina el compromiso de la Legislatura de Tucumán en acompañar esta iniciativa, que busca generar un espacio de reflexión, intercambio y construcción de miradas integrales sobre la niñez y adolescencia trans.
Por su parte, Reina manifestó: “Logramos, gracias a la colaboración del vicegobernador, concretar un encuentro global con referentes nacionales, provinciales e internacionales, que abordará ejes claves como el acompañamiento en salud mental, la prevención de autolesiones y la importancia del rol de las familias”.
Con los niños NO
Con los niños no se juega, son sagrados. Los adultos podrán tener todas las peleas ideológicas que quieran, pero meter a los chicos en ese campo de batalla es cruzar un límite moral inaceptable.
El kirchnerismo, con su discurso de inclusión mal entendida, vuelve a mostrar hasta qué punto puede pervertir la discusión pública. Y los tucumanos -como el resto de los argentinos- deberán decidir en las urnas, el próximo 26 de octubre, si siguen avalando a una dirigencia que empuja a la sociedad a este abismo cultural, o si ponen un freno.
Con los niños, no. Nunca.