La candidata oficialista de izquierda quedó tercera
En un lento e infartante escrutinio, Honduras define quién será su próximo presidente tras una reñida elección que por ahora solo tiene una confirmación: la izquierda dejará el poder, con la candidata oficialista, Rixi Moncada (Partido Libre), en un alejado tercer puesto mientras dos candidatos conservadores pelean voto a voto el primer lugar en un país donde no hay balotaje.
El candidato Nasry Asfura, apoyado por el Presidente Donald Trump -y también por el argentino Javier Milei-, y su rival Salvador Nasralla, liberal, mantienen este lunes una cerrada lucha de menos de medio punto en unas elecciones en las que varios candidatos apelaron al fantasma del fraude.
“Tito” Asfura, del Partido Nacional (PN), aventaja a Nasralla por apenas 0,2% de los votos, tras el conteo del 56% de las actas de votación, según los lentos resultados preliminares el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Mientras avanzaba el lento escrutinio, Nasralla, un popular presentador de televisión de 72 años que postula por el Partido Liberal, se fue acercando al empresario apoyado por Trump y ahora los separan menos de 5.000 votos. El primero reúne el 40% de los votos y el segundo, 39,8%.
Moncada, del partido oficialista Libertad y Refundación (Libre), de izquierda, estaba en tercer lugar con el 19,18%.
Una vez finalizada la votación, el CNE tiene un máximo de 30 días para realizar la declaratoria oficial de los comicios.
Este lunes, Nasralla dijo que confía en ponerse a la cabeza del conteo cuando ingresen resultados de algunas provincias.
“Es imposible determinar al ganador con los datos que tenemos”, aseguró el analista político Carlos Cálix.
En las elecciones de este país, con historial de fraudes y golpes de Estado, los hondureños decidían si renovaban la confianza en su primer Gobierno de izquierda, a cargo de Xiomara Castro, o seguían los pasos de Bolivia y la Argentina, desde donde Milei también respaldó a Asfura.
