En una década, Rossana Chahla pasó de ser directora de un hospital en Tucumán a convertirse en una de las dirigentes políticas más influyentes de la provincia
Por SIN CODIGO
Su carrera, que nunca fue planeada, tiene un ritmo vertiginoso: seis años como ministra de Salud, dos como diputada nacional y ahora lleva dos como intendente de San Miguel de Tucumán, una de las ciudades más importantes del país.
Chahla es una outsider en toda regla. No proviene del mundo político tradicional y, aunque pertenece al Partido Justicialista, se mueve con cierta independencia. “Libero”, en términos futbolísticos: juega suelto, sin atarse a los manuales clásicos de la política. Dice lo que piensa, incluso a riesgo de incomodar, y eso le ha generado respeto pero también muchas críticas.
Lo más singular de su figura es que parece tener lo que muchos políticos carecen: un “ángel”. Ese magnetismo difícil de explicar que acerca a la gente. Se ha convertido en una especie de influencer en TikTok, con videos que, aunque algunos tilden de ridículos, la mayoría encuentra graciosos, frescos y originales. En un escenario donde muchos dirigentes parecen lejanos, ella logra cercanía.
Su estilo de gestión también marca la diferencia. Chahla no basa su acción en grandes obras, sino en la suma de pequeñas intervenciones concretas en los barrios, en contacto directo con los vecinos. Está lejos de solucionar grandes problemas como el bacheo, pero le construye una rampa para un vecino discapacitado que le soluciona la vida. Esa cercanía la transformó en la política con mayor imagen positiva de la provincia, solo detrás del actual gobernador Osvaldo Jaldo.
Desde la política tradicional la critican por no rodearse de caciques territoriales ni figuras pesadas del PJ. Lo ven como debilidad. Pero, para muchos, esa independencia podría ser justamente su fortaleza: no depender de las viejas estructuras que en Tucumán pesan demasiado.
Hoy, Chahla es mirada con atención por muchos políticos, sabiendo que su crecimiento en la escena local no tiene techo. ¿Podrá ser la que releve a Jaldo cuando este ya no tenga chances de seguir en la primera magistratura? El camino no es sencillo: enfrente tiene a un político experimentado y poderoso como es el actual gobernador. Sin embargo, la médica que alguna vez dijo no querer saber nada de política, ya dio muestras de que sabe jugar y que su ascenso no se detiene.
