Desde hace un año se ahorra para comprar ventiladores
En Villa 9 de Julio, docentes y alumnos de la escuela Rector Benjamín Villafañe, deben soportar estos días de intenso calor sin ventilador y sin agua.
Allí concurren unos 600 niños de escasos recursos. Ana Aiziczon, contó las medidas que debieron tomar para poder aguantar una temperatura de 35°: “Le pedimos a los chicos que se hidraten mucho. No les exigimos el uso del delantal; en cambio, les permitimos que asistan con remera blanca y short. Remarcamos a los padres la importancia de que los niños vengan frescos y con agua”.
Según contó una madre: “El miércoles una niña se retiró antes por un golpe de calor, casi en shock. También un niño sangró por la nariz. En el cañito del patio se lavan las manos para refrescarse”.
La dirección de la escuela tomó la decisión de comprar ventiladores con el dinero recaudado de ayuda escolar y cooperadora. Los niños deben pagar $1500 de cooperadora, pero no se les restringe el ingreso si no pueden hacerlo por la situación económica. Por eso, la recaudación viene haciéndose desde hace un año para la compra de ocho ventiladores de paleta de acero.
Otro problema del establecimiento es la falta de agua debido a un mal funcionamiento de la bomba. La vicedirectora explicó que para que los niños no pierdan clases, el personal auxiliar se encarga de llenar con baldes con agua las mochilas de los inodoros constantemente.
Con el dinero de UN acto político podrían comprarse, no ventiladores sino aires acondicionados para las escuelas tucumanas.