Adolescentes del último año de la Escuela Lorenzo Massa unidos para que un compañero pueda viajar a la gira de egresados. En una época marcada por el individualismo, un grupo de estudiantes tucumanos nos recuerda que la empatía y la solidaridad siguen vivas, sobre todo cuando se trata de los vínculos más genuinos: los de la amistad
Los protagonistas son alumnos del último año del Lorenzo Massa, de San Miguel de Tucumán, que viven los días más intensos de su adolescencia con un anhelo compartido: el viaje de egresados. Esa travesía que no solo cierra una etapa, sino que abre las puertas simbólicas de la adultez.
Pero este año, uno de los chicos, Gabi, no iba a formar parte del viaje. Con una honestidad que conmueve, les comunicó a sus compañeros que no podría sumarse por razones económicas. Lejos de dejar que eso rompiera el sueño colectivo, sus amigos decidieron que no iban a permitir que Gabi se quedara atrás. Y sin decirle nada, comenzaron una campaña para juntar el dinero necesario. Elías, uno de los grandes amigo de Gabi inició una colecta a través de su TikTok y rápidamente se hizo viral. Todo empezó casi como una broma, con un video improvisado que rápidamente se viralizó. Pero lo que nació como un chiste se transformó en un acto profundo de amor. “La verdad habíamos visto este tipo de videos en TikTok con mi amigo hace como 3 meses, y siempre nos proponíamos hacerlo, a ver cómo salía y si nos viralizábamos… y tuvimos toda la repercusión que estamos viendo”, cuenta Elias Akiki.
El primer video se difundió en el grupo de padres del colegio y, en pocas horas, explotó en redes. Superó el millón de reproducciones, recibió miles de comentarios y el alias (elias.1412 a nombre de Elias Akiki) de Elias fue replicado por streamers muy conocidos del país. La colecta ya superó los $2.000.000, y aunque el objetivo final es $3.000.000, el grupo está más motivado que nunca.
El viaje está previsto para el 10 de julio, y ahora ese sueño parece estar cada vez más cerca. Gracias a la solidaridad de miles de personas y a la iniciativa de un grupo de amigos que decidió no dejar a nadie atrás.
Gabi es un chico muy querido en el curso por su calidez, respeto y compañerismo. Tal vez por eso, lo que sus compañeros decidieron hacer por él no fue un acto de caridad, sino un acto de justicia: “Si vamos, vamos todos”, dijeron. Y Tucumán respondió.
Con una movida solidaria, los chicos fueron recaudando dinero para que su amigo pueda viajar. Lo más emocionante: Gabi no sabía nada. Cuando le dieron la sorpresa, los abrazos fueron tan intensos como sinceros. En medio de una sociedad que muchas veces parece ensimismada, estos adolescentes nos enseñan que el futuro tiene esperanza si lo construimos desde el corazón.
Porque en Tucumán, cuando alguien sueña, los demás no miran desde la vereda de enfrente. Se arremangan, se comprometen y empujan para que ese sueño se haga realidad. Y esa, tal vez, sea la mejor lección que pueda dejar una escuela.