Sufrió pérdida de masa encefálica y pelea por su vida en el Hospital Ramos Mejía. Además, un policía de la Ciudad fue herido de bala
En medio de la violencia, el caos, los golpes y los proyectiles en el enfrentamiento entre manifestantes y policías durante la marcha de jubilados-hinchas de fútbol frente al Congreso de la Nación, Pablo Grillo, un reportero gráfico, pelea por su vida. Sufrió una severa lesión en la cabeza, que le produjo pérdida de masa encefálica y está en grave estado en el Hospital Ramos Mejía. El golpe fue provocado por una cápsula de gas lacrimógeno.
Fue uno de los 20 civiles que resultaron heridos durante los feroces cruces en las calles del centro de la Ciudad de Buenos Aires.
Fabián Grillo, padre de Pablo, dijo que a su hijo lo estaban operando y que “la situación es grave”, y confirmó que el joven “estaba trabajando en forma independiente” durante la marcha. Cerca de la medianoche, el fotógrafo salió del quirófano. Ahora permanece internado, bajo pronóstico reservado y con respirador
Además, un policía de la Ciudad recibió una herida de bala. El agente permanece internado en el Hospital Argerich, según le indicaron a este medio fuentes de la fuerza de seguridad porteña.
El uniformado recibió el impacto del proyectil en su brazo izquierdo mientras desempeñaba sus tareas en la avenida Presidente Roque Sáenz Peña (Diagonal Norte) y Mitre. Rápidamente, se solicitó apoyo y la presencia de una ambulancia, que luego trasladó a la víctima al centro de salud mencionado, donde era operado por una fractura expuesta en las últimas horas de la tarde.
Hubo otros seis uniformados heridos de las fuerzas federales: tres de la Policía Federal Argentina (PFA) y tres de la Prefectura Naval Argentina (PNA).
