El preservativo no es solo para evitar un embarazo, también debe usarse para no contraer enfermedades de transmisión sexual. Una especialista da tips para un mejor uso y conservación
Las variedades de preservativos permiten que el cuidado también sea una opción placentera. Hay preservativos según su forma, finalidad, efecto, textura y sabor.
El preservativo funciona como una barrera física que impide la salida de los espermatozoides y evita el ingreso y egreso de microorganismos infecciosos. “Si bien hay muchos anticonceptivos, el preservativo es el único que evita embarazos no deseados y la prevención de Enfermedades de Transmisión Sexual”, señaló Cecilia Valeriano, directora de Programas de Fundación Huésped.
Los más conocidos, los preservativos clásicos, se compran en cualquier kiosco o farmacia. Vienen por tamaños XS, M, L o XL, y, también, se pueden encontrar por grosor, como extrafinos o extragruesos. Pero en un sex shop, hay variedades que además de proteger pueden garantizar mayor placer.
Según su forma: Anatómicos o paralelos. La forma del preservativo es la misma, pero la anatómica garantiza mayor placer, ya que permite que se sienta menos. El paralelo mantiene una forma recta desde la punta hacia la base y es el más conocido popularmente. En cambio, el anatómico tiene una forma pre armada del pene, por lo que logra adherirse mucho mejor a la piel.
Según su efecto: Lubricados, retardantes o espermicidas. Los preservativos con lubricantes tienen un agregado dentro del preservativo, que permite tener una experiencia diferente. Hay opciones como:
Extra lubricado, que garantiza humectación durante la penetración, lo que es recomendable para el sexo anal, lubricados con geles estimulantes que producen calor o frío, para mayor placer.
Condón retardante permite retrasar la eyaculación porque contiene lubricante con 5% de benzocaína, que funciona como anestésico local. Al tener contacto con el pene, pierde sensibilidad y toma más tiempo eyacular.
En el caso del preservativo con espermicidas, está cubierto por un gel que impide la movilización de los espermatozoides, de modo que reducirá aún más la posibilidad de un embarazo.
Por su textura: Texturados o tachas. Podés encontrar texturados, que son preservativos con el relieve de líneas verticales ubicadas de diferentes maneras, algunas dentro y/o fuera del condón. O los que tienen tachas, que tienen relieves circulares. Ambos generan una estimulación más intensa tanto para la persona pasiva como para la activa.
Por su sabor: Desde frutas a tragos tropicales. Para que nunca nos quede un sabor amargo, hay preservativos con sabores. Además de los clásicos frutilla, chocolate y menta, hay sabores internacionales y colores exóticos como el preservativo sabor a Caipiriña y colores acorde al trago brasileño.
“Para los saborizados, deben usar un lubricante a base de agua y no otro lubricante que pueden dañar el látex. Los saborizados vienen secos, porque están pensados para ser lubricados con la saliva”, dijo Valeriano.
Por su finalidad: Para protección femenina y para los dedos. Son los más difíciles de conseguir, pero tienen la finalidad de proteger contra las Enfermedades de Transmisión Sexual. En el caso del preservativo de la mujer, tiene una forma similar: “Es un tubo de látex con un extremo abierto y el otro cerrado. En una punta tiene una argolla que se coloca como la copa menstrual. Esto se pone previo a la penetración, una vez se tira para afuera y se descarta”, indicó Cecilia Valeriano.
El preservativo para los dedos, suele venderse para evitar el contacto directo de una lastimadura con los genitales o la boca. Los preservativos son tubos de látex, pero los más pequeños son para que se amolden a cualquiera de los dedos. No suelen tener lubricante, por eso se recomienda utilizar lubricación adicional.
Cómo mejorar el uso del preservativo y cómo conservarlo
Conservarlo correctamente garantizará una mayor protección.
Es importante guardar los preservativos en lugares frescos y secos: “No en el bolsillo del pantalón o billetera, porque pueden estar expuestos al calor de nuestro cuerpo. Colocarlos en bolsillos holgados o lugares que eviten sol o calor”, indicó la especialista.
Antes de usarlo, hay que fijarse la fecha de vencimiento y que el paquete no esté manipulado: “Si uno aprieta el paquete y hay una almohadilla de aire, está bien. Si se desinfla es porque el preservativo está dañado. Como pierde lubricante con la pinchadura será más probable que se rompa”.
El preservativo se abre siempre con los dedos, nunca con tijera. “De esta manera se evitan pinchaduras accidentales”.
