Activaron los protocolos para garantizar la validez de los trámites y la reposición gratuita
El Gobierno pidió con urgencia a los ciudadanos argentinos, tanto en el país como en el exterior, para que devuelvan ciertos pasaportes que podrían tener defectos de seguridad.
Así fue, después de que el Registro Nacional de las Personas (RENAPER) detectó anomalías en la tinta de seguridad utilizada en esa documentación.
La advertencia alcanza a documentos de la serie AAL, dentro de los rangos numéricos AAL314778–AAL346228, AAL400000–AAL607599 y AAL616000–AAL620088.
A pesar de que en un inicio estimaron que la falla afectaba a entre 5.000 y 6.000 pasaportes, un correo del Consulado Argentino en San Pablo, enviado a fines de agosto, amplió la revisión a más de 200.000 libretas comprendidas en esas series.
En este sentido, el Gobierno aclaró que no todos los documentos presentan irregularidades, pero que no existe certeza de cuáles sí están comprometidos.
Fuentes oficiales confirmaron a TN que el incidente fue provocado por una tinta negra de seguridad defectuosa suministrada por un proveedor alemán, el mismo que abastece a la Argentina desde hace 12 años. La falla es indetectable a simple vista y solo puede ser registrada por equipos de lectura en los puestos migratorios.
Una vez identificada, las partidas defectuosas fueron retiradas y aplicaron los protocolos correspondientes. Desde Casa Rosada también indicaron que la situación está resuelta y la producción continúa con normalidad.
El RENAPER, en coordinación con Migraciones y Cancillería, diseñó un protocolo para que, si un pasaporte con fallas es detectado en el exterior, igualmente se lo reconozca como documento legal válido, para permitir el tránsito del ciudadano. En paralelo, gestionan la emisión gratuita de una nueva libreta.